El ojeador del talento laboral

Es el encargado de crear un buen clima laboral. Tiene claro que las compañías triunfan en función de las personas que se encuentran detrás. Bajo esta premisa, trabaja en la formación y desarrollo, el entrenamiento individual y de equipo, la motivación y el coraje. Construye un emporio con carácter de líder. Un modelo empresarial que da un gran peso a la felicidad de los empleados. Identifica los puntos fuertes y los utiliza. César López es un ojeador de gente con talento que detecte las oportunidades que puedan crearse en el mundo que se avecina; gente con valores que afronte los retos con optimismo y saque el lado bueno de los malos momentos.

Nació en Palencia pero su curiosidad le convirtió en ciudadano del mundo. Estudió Derecho en la Universidad de Valladolid (UVA) por influencia de su padre, un hombre hecho a sí mismo. Recuerda con mucho cariño cuando les cantaba los temas de Derecho Penal. Estudiaba por las noches y a distancia. Tanto le marcó el esfuerzo que hacía su progenitor para sacar adelante a su familia que decidió seguir sus pasos. Se convirtió en abogado, eso sí, admite que aún tiene «un largo recorrido» para conseguir todo lo que él ha logrado.

Después de graduarse, hizo la mili. Tuvo suerte y el destino que le tocó fue Valladolid, así que podía dormir en casa. Para aprovechar el tiempo realizó unas prácticas por la tarde en un despacho de abogados. Se acercaba el final y había que decidir qué hacer. Un día vio un cartel que anunciaba un curso en la Cámara de Comercio de Palencia sobre entrevistas de personal. En él se ofrecían las claves para encontrar un empleo acorde a la formación. «Me enganchó de tal manera que ya no tuve escapatoria», admite.

Por eso, se matriculó en un máster de Recursos Humanos a distancia en el Centro de Estudios Financieros. Ya lo tenía claro. Su futuro se escribiría trabajando con personas. Su primera conexión con el mundo laboral fue en la sede Adecco en su ciudad natal. Fue breve e intenso. Su siguiente destino, Gijón como director de zona de Asturias y León. A los dos años cambio de empresa, de sector y de ciudad. Se trasladó a Valencia como responsable de Recursos Humanos de un hipermercado. En el año 2000, tras la fusión de Pryca y Continente, creando Carrefour, le promocionaron a la sede central de Madrid para pilotar el área de Compensación y Beneficios. De ahí pasó a Canon como director de Recursos Humanos en 2002.

Desde entonces toda su carrera se ha desarrollado en esta compañía japonesa especializada en productos ópticos y de captura y reproducción de imágenes, que incluye fotografía, vídeo, fotocopiadoras e impresoras. También ha sido responsable de Recursos Humanos de España y Portugal. En 2013 se marchó a Londres como director de Recursos Humanos de las oficinas centrales de Canon en Europa. A los dos años sumó la responsabilidad europea del área de Compensación y Beneficios y desde 2016 es el responsable europeo de los Recursos Humanos de una de las principales Unidades de Negocio, Document Solutions, y coach interno de la organización.

López sostiene que echando la vista atrás y analizando su trayectoria profesional se ha especializado en procesos de transformación y cambios organizativos, bien motivados por el resultado de una fusión, bien por la adecuación constante de la organización a los entornos cambiantes en los que hoy por hoy se mueve la sociedad. Ha vivido tres fusiones empresariales, en la última de ellas, Canon más Océ, trabajó en complejos procesos de gestión del cambio, integración, adecuación, cultura empresarial y de cambio del diseño organizativo.

En 2015 este abogado palentino lideró un proyecto europeo de Job Architecture durante dos años. En él definió todos los niveles organizativos de la empresa, todos los puestos y realizó un benchmark externo de mercado que les permite tener, hoy por hoy, una estructura organizativa europea ágil, acorde a las tendencias del mercado y que potencia y facilita los planes de carrera internos.

«Al haber trabajado a nivel de país y ahora en las oficinas centrales europeas, me permite tener la experiencia, por un lado, de la implementación del cambio que viene de central y, por otro, posteriormente, ser copartícipe del cambio organizativo que se pretende implementar en los países», expone César López, antes de comentar que en estos momentos está desarrollando su parte más estratégica trabajando con el negocio directamente en el rediseño organizativo para los próximos años.

Tiene claro que la base del éxito es ser uno más del equipo. «Cada uno con sus roles y responsabilidades en la empresa, pero nadie es más o menos que nadie». Por ello, potencia un entorno de trabajo positivo, transparente, de confianza y de complicidad. «La persona es el principal valor de las empresas y las empresas crecen gracias a que crecen las personas que las forman y un equipo es mejor cuanto mejores son las personas que le conforman», señala. Estimula a su equipo, proponiendo grandes retos donde los errores forman parte del aprendizaje.

En su opinión, la investigación y la innovación son el agua que hace crecer las empresas y allí donde hay agua hay vida. «Se está haciendo mucho pero ese mucho todavía es poco. Castilla y León se merece mucho más en ese sentido», indica López, antes de recomendar a las personas que están buscando trabajo que salgan de su zona de confort porque a partir de ahí, empieza la magia. «Los trabajos no llaman a la puerta, hay que buscarlos. Por ejemplo, mi mujer lo dejó todo por venirse conmigo a Londres y se pasó seis meses buscando su lugar, formándose y al final consiguió un buen trabajo en una empresa puntera a nivel internacional. Si te focalizas en lo que quieres, las oportunidades aparecen aunque es difícil y el dónde es la incógnita», manifiesta.

Está muy orgulloso de su trabajo pero sobre todo de su mujer, de sus cuatro hijas, de sus padres, de su hermano y del resto de su familia. Con su apoyo «incondicional» hacen que todo sea más sencillo. Como profesional ha sumado muchos triunfos. El último: la nominación a nivel internacional como ‘Líder Multiplicador’ del año. «Estoy muy contento por haber sido preseleccionado y de las muestras de cariño que estoy recibiendo a medida que la gente se va enterando».