15 años sin ganar al Sevilla como local
La última victoria blanquivioleta en Zorrilla data de 2010 y en el Sánchez-Pizjuán, en 2012
Desde la primera fecha, tres empates y tres derrotas pucelanas
Escudero y Javi Sánchez protestan a Ortiz Arias por el gol 'robado' en 2023.
La historia de los Real Valladolid-Sevilla presenta caminos opuestos, según se analice a corto plazo o de forma global. En el global entre ambos equipos en los dos estadios Zorrilla, las cifras sonríen al conjunto pucelano. Sin embargo, los enfrentamientos más recientes toman un indudable color blanco. El Sevilla no pierde en el feudo blanquivioleta desde 2010, ya hace quince años.
El 13 de abril de ese 2010 llegó el último triunfo vallisoletano, con Clemente de entrenador. 2-1 con goles locales de Diego Costa y Manucho. Cala redujo diferencias. En 2012 se dio la última victoria pucelana en este duelo, pero fue en el Sánchez-Pizjuán, por 1-2.
A partir de 2010, el Sevilla sacó de sus visitas a la avenida del Mundial 82 tres empates y tres victorias. La más sonora, la última: el 0-3 de hace dos temporadas (22-23), después de que a Ortiz Arias se le ocurriese no contabilizar un gol de Escudero, al señalar el final de la primera parte cuando el balón, chutado antes del pitido, se dirigía la red.
La decisión y el escándalo posterior con un equipo muy tocado en lo anímico, ya con Pezzolano en el banquillo, dejó muy tocado al Real Valladolid. En la segunda parte el Sevilla lo masacró, con goles de Mir, Papu Gómez y Corona.
En el balance global, castellanos y andaluces se han enfrentado en 44 ocasiones en Primera División en el campo de los primeros. 20 encuentros los ha ganado el Real Valladolid y doce el Sevilla, con otros doce empates. Los blanquivioleta han marcado en esos duelos 67 goles y los sevillistas 64, pues sus victorias fueron menores en número pero más holgadas en tantos.
El mayor triunfo local está cerca de cumplir tres cuartos de siglo. Llegó en la temporada 50-51, el 17 de septiembre de 1950, con un 4-1. El conjunto entrenado por Ipiña marcó por medio de Aldecoa, Coque, Pepín y Muné. Los hispalenses, dirigidos por Campanal, mito del Sevilla como jugador, anotaron el empate momentáneo en botas de Pineda.
La misma diferencia de goles se dio en la Liga 89-90. El Pucela de Fernando Redondo ganó 3-0 en un partido inolvidable por el triplete de Moya. El técnico rival era nada menos que Vicente Cantatore.
La mayor derrota pucelana llegó en las temporadas 52-53, 60-61 y 94-95, con sendos 0-4. También cabe destacar el 2-5 de la 54-55. Porque el Sevilla, pese una trayectoria algo irregular, con descensos a Segunda, casi siempre ha estado entre los grandes del fútbol español.
Precisamente en la categoría de plata el balance es favorable a los de Nervión. Los cuatro partidos en Zorrilla acabaron con una victoria local, un empate y dos triunfos visitantes. Todos los encuentros se decidieron por la mínima, disputándose entre 1969 y 1974.
La victoria local que mejor sentó no fue en la Liga, sino en la Copa de la Liga. El Real Valladolid, campeón del torneo en 1984, lo hizo tras doblegar en cuartos de final a los del Guadalquivir por 3-1.
En el Sánchez-Pizjuán el resultado había sido de 2-0 y entonces, como ahora, no se valoraban más los goles a domicilio. Tras la prórroga en Zorrilla se llegó a los penaltis, donde los locales fueron más certeros.