Preocupación en el Real Valladolid por la 'fragilidad' de Marcos André

¿Qué me pasa Doctor? Esta es la pregunta que planea sobre la cabeza de Marcos André. El delantero del Real Valladolid está en el dique seco por culpa de un problema en su pie. Una inflamación que le ha hecho ya perderse dos partidos de Liga.

El brasileño  acumula 299 minutos en seis partidos , tres de ellos como titular con cuatro triunfos, un empate y una derrota, y ha marcado dos goles, ante el Oviedo para dar la victoria y ante el Burgos. Pero en  dos de los últimos encuentros, ante el Eldense y el Espanyol, se cayó de la convocatoria por culpa de esos problemas físicos. Las ausencias en los entrenamientos de esta semana invitan a pensar que no llegará a tiempo para el encuentro del próximo domingo (21.00 horas)  ante el Andorra.

En el Real Valladolid hay cierta preocupación con el run-run presente de una fragilidad física certificada en sus antecedentes. Y es que   en las tres últimas campañas , una en el Real Valladolid y dos en el Valencia, equipo al que fue traspasado antes de su regreso a Zorrilla el pasado verano, Marcos André se ha perdido un total de 36 partidos por lesión. Se dice pronto. 36 ausencias que le convierten casi sin querer en un jugador de cristal o de porcelana.

A los dos partidos que se ha perdido por lesión esta campaña con el Real Valladolid se unen los 20 de la temporada 20-21 también con la camiseta del Pucela (4 por una lesión en el muslo derecho y 16 por una pubalgia) y los 14 en sus dos campañas (21-22 y 22-23) en las filas del Valencia (4 por un esguince, 9 por rotura de menisco externo de su rodilla y 1 por coronavirus). 36 ausencias a las que se debe sumar, otras tres esta misma campaña no por lesión sino por su fichaje en el último momento, el 29 de agosto, que le impidió ser alineado en las tres primeras jornadas del actual campeonato. 

Ausencias que contrastan con los 38 partidos que jugó en Segunda con el Mirandés cuando fue cedido por el Pucela en la 19-20. Una campaña que le puso en el escaparate al  lograr 12 goles, un rendimiento goleador que prácticamente calcó en otras tres ocasiones (11, 10 y 12 goles), dos con el Logroñés y otra con el Mirandés). En todas ellas Marcos André fue capaz de jugar más de 30 partidos esquivando las lesiones.

Casualidad o no los problemas físicos de Marcos André vuelven a encender la luz de alarma en el Real Valladolid.