El Real Madrid llega en avión a Valladolid

210 kilómetros separan Valladolid de Madrid. Una distancia muy cómoda para recorrer en un autocar de última generación, como es el de equipo blanco. Si se quiere huir de las ruedas y las carreteras, la alternativa más rápida es el AVE o el Alvia. De la estación Chamartín hasta la de Campo Grande median unos 55 minutos. El tiempo para leerse bien leído el periódico o de profundizar sobre algunas peculiaridades del rival.

Pero el Real Madrid hace tiempo que abandonó estos medios de locomoción terrestres para apuntarse al aéreo. La expedición merengue viajará desde la capital de España hasta Villanubla en su avión. Pasará menos tiempo en el aire que entrando y saliendo de ambos aeropuertos, con los requisitos que ello conlleva, aunque sean rápidos en este caso.

El gasto de volar es mucho mayor que el de las otras dos opciones pero en la casa blanca hace tiempo que han priorizado la privacidad sobre otros condicionantes, como la rapidez o el ahorro. De hecho el patrocinador principal del club es una línea aérea: Fly Emirates. Es la dueña del avión del Real Madrid, un Airbus A380 valorado en 400 millones, con capacidad para 853 pasajeros y con todos tipo de lujos en su interior, como duchas y armarios individuales. Dada la escasa duración del vuelo, con apenas media hora en el aire, es posible que el Real Madrid se haya decidido por una aeronave chárter de menor tamaño.

La llegada a Villanubla está prevista mañana a las 12 horas y después la expedición blanca se concentrará hasta la hora en que viaje hacia Zorrilla en la sede de sus últimas visitas: el hotel AC Palacio de Santa Ana, en Arroyo-La Flecha.

Habrá una zona acordonada para que los aficionados observen a los jugadores del Real Madrid entrar y salir del recinto, pero no habrá contacto directo con ellos.