SOS de la élite regional

El balonmano de élite castellano y leonés se unió por primera vez en su historia ante un enemigo común: la crisis económica provocada por la pandemia. La única comunidad con cuatro equipos en la élite lanzó una llamada de socorro a quien corresponda, que es la administración autonómica. Una petición de auxilio que adelantó este diario el miércoles por parte de Mario Arranz.

En Valladolid se reunieron para celebrar una rueda de prensa conjunta los presidentes de Villa de Aranda (Eusebio Martín), BM Nava (Julián Mateo), Ademar (Cayetano Franco) y Recoletas Atlético Valladolid (Mario Arranz).

La petición de auxilio a cuatro bandas no se debe  a una mala administración de los presupuestos  por gastos desaforados, ni a una pésima planificación económica. 

En balonmano los ingresos por socios, abonados y taquilla son cruciales y esta temporada se han visto reducidos a su mínima expresión a causa de la pandemia y la decisión de la Junta de mantener durante muchos meses cerrados los polideportivos. 

Una medida que no ha sido unánime por parte de las administraciones autonómicas en toda la Asobal, competición que cuenta con bastantes clubes con subvención directa de las mismas dada su condición de equipos de élite y embajadores del territorio, lo que no ocurre en Castilla y León. 

«El deporte es el mejor embajador y el mejor escaparate de promoción mediática para el turismo de nuestra región», convinieron  los cuatro presidentes. 

«No estamos hablando de oportunismo, sino de necesidad. La viabilidad inmediata no está en peligro, pero sí a medio plazo. Estamos pidiendo créditos, garantizando y avalando con nuestro propio patrimonio, para no tener pagos retrasados. Llevamos hablando dos años con la Junta e hicimos una propuesta de intercambio publicitario, una colaboración se perdió hace varios años. Nos gustaría recuperarla», dijo Mario Arranz.

Cayetano Franco pidió «sinceridad y rapidez» a las instituciones. «Si van a invertir en nosotros, que lo hagan ya. Es una necesidad y una inversión para ellos. Teníamos antes una inversión publicitaria que rondaba los 250.000 euros. No queremos compararnos con nadie pero en Castilla-La Mancha tenían unos 100.000 y ha subido esta temporada debido a la necesidad». 

Julián Mateo recordó que los clubes están atados de pies y manos. «Con la pandemia nos paralizan la entrada de espectadores pero siguen igual los gastos, más añadidos como pruebas médicas, y pagando la producción de la televisión para que nuestros aficionados puedan vernos».

Eusebio Martín comentó que la Junta debe apostar «por su embajador más importante a nivel mediático: el deporte, que ha puesto a la Comunidad en lo más alto, a nivel nacional e internacional. Si la junta no apuesta por esto, el deporte irá desapareciendo».