Renovación desbloqueada

Por fin la agencia Bahía Internacional ha dado señales de vida y aceptado hablar con el Real Valladolid de cara al futuro de Miguel, jugador blanquivioleta al que representa. Los agentes del tudelano se han hecho esperar después de varias llamadas del club. Un primer envite en una partida que se prevé larga y azarosa.

El delantero del Promesas que entrena habitualmente con el primer equipo está en su mejor año. Lleva nada menos que 14 goles en Segunda B, interviene mucho en el juego, pendiente de tirar pero también de asistir, y ha ganado mucho en trabajo defensivo. Una evolución vista por todo el fútbol español que le puede abrir las puertas, a sus 20 años, de clubes más potentes. Hace dos ya lo quiso la Juve para su cantera. 

Ésa es la baza de Bahía para pensarse en renovar el contrato. La del Real Valladolid es el tiempo. Miguel no finaliza contrato esta temporada, sino la siguiente, en junio de 2021. En Zorrilla harán todo lo posible para que la próxima Liga no comience con el tudelano sin haber renovado. Uno de los acicates que le pueden ofrecer es su presencia en el primer equipo. Contar con tres delanteros venidos de fuera supone muy a menudo tapar la evolución de uno de los que está en casa, si tiene la capacidad suficiente para ser profesional. 

El Real Valladolid quiere convertir a Miguel en un hombre de club, siempre que su rendimiento no sea tan bajo que se le deba buscar destino, o tan alto que vengan a ficharlo clubes más poderosos.

La renovación, en el caso de que se produzca, no parece que sea fácil ni rápida. Hay más jugadores pendientes de ampliar o retocar contratos, pero en el club se quiere pensar primero en el aspecto deportivo y supeditar lo contractual, aunque algunas renovaciones sean automáticas.