Mono de faena y luego disfrute
El Recoletas se enfrenta esta noche al Cangas en un partido que puede marcar el devenir del equipo en la Liga antes de la Copa Asobal / Si pierde el descenso se pondrá a un punto
Manu García se eleva en el extremo para lanzar y batir al portero del Cangas, Javi Díaz, en la pasada campaña.-J.M. LOSTAU
Valladolid volverá a vivir el fin de semana la esencia del mejor balonmano. Pero antes, por capricho de la Liga Asobal, habrá que jugar una jornada de Liga, la última de la primera vuelta, que puede ser clave en el devenir del Recoletas Atlético Valladolid en la competición. Yes que no es lo mismo acabar a cinco puntos del descenso, que hacerlo a uno. Yen esa tesitura se encuentra el equipo vallisoletano en el choque de esta noche (20.30, Huerta del Rey) contra el Cangas de Morrazo.
Ganar serviría para dejar al equipo gallego, y al descenso, a cinco puntos, y poder pasar unas Navidades tranquilas pensando en mejorar los números de cara a una segunda vuelta donde el calendario invita a ser más optimista. Perder significa meterse en muchos problemas. El descenso quedaría a un punto y la presión de vivir una segunda mitad del campeonato con la soga al cuello. De ahí que antes de pensar en la fiesta y el premio que supone la jugosa Copa Asobal, haya que ponerse el mono de faena para batir a un rival que fuera de su cancha ha perdido los siete enfrentamientos que ha disputado.
Es el momento de comprobar qué versión ofrecerá el cuadro pucelano. El de los dos últimos choques en casa contra Granollers y Puerto Sagunto, o el que muestra a domicilio donde desconecta desde el primer minuto para, posteriormente, tener que nadar contra corriente. El efecto de Huerta del Rey tiene que ser vital para evitar una sorpresa ante el conjunto cangués. Una derrota encendería la luz de alarma.
El Cangas es un experto en manejarse en situaciones complicadas, todos los años arranca mal pero logra cambiar el sino. Una plantilla formada por jugadores muy veteranos como Muratovic o Javi Díaz y jóvenes que proceden de la cantera. Su primera línea tiene buen lanzamiento, y están bien dirigidos por dos centrales como Rubén Soliño y Valiantsin Kuran. El lateral serbio Mihajlo Mitic con 49 goles es el máximo goleador del equipo gallego, con los extremos Moisés Simes (40) y Adrián Menduiña (43) también destacados en estas lides. En la última jornada abandonó el puesto de colista tras derrotar a Bada Huesca (23-19).
Las lesiones siguen lastrando al equipo de Óscar Ollero. Ni Jorge Serrano, Dani Pérez y Claudio Ramos estarán hoy. Por fortuna se recupera a Rubén Río, que se incorporó ayer a los entrenamientos. «Me encuentro bien, recuperado y con ganas. Mantengo la misma confianza de antes de la lesión», afirmó el lateral derecho en la rueda de prensa previa al choque. Por su parte, el portero Carlos Calle podría volver, aunque depende de unas pruebas.
El gallego también es consciente de la importancia del choque contra sus paisanos. «Sabemos que es una prueba de fuego donde nos jugamos gran parte de la primera vuelta. La victoria nos daría tranquilidad, alejarnos de la zona de abajo, porque cuando las cosas están apretadas el brazo se encoge y todo es más complicado», explicó.
Como dato, de los últimos seis partidos que han enfrentado a castellanos y gallegos, la balanza cayó de lado pucelano en cinco, de esos, tres han sido en casa. El año pasado, se venció con claridad por 28-20.