Diario de Valladolid

Julio Martínez luce en Valladolid una pintura que nace como acto de resistencia

Presenta en Espacio Abierto la serie 'Liquen', con la que hace evolucionar su abstracción y reivindica la pincelada como un gesto que nos conecta con la realidad

Julio Martínez, este miércoles, en Espacio Abierto.

Julio Martínez, este miércoles, en Espacio Abierto.M. A. SANTOS - PHOTOGENIC

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Lleva años, décadas, haciendo de la pintura algo más que un simple ejercicio de introspección en busca de la belleza, de la armonía, de nuevos caminos artísticos. Para Julio Martínez (Valladolid, 1969), aferrarse a un pincel es un puro acto de resistencia. Y en ese afán por no dejarse doblegar por las ‘modas’ encuentra la metáfora que hila su última serie, Liquen, que exhibirá desde este jueves y hasta el 22 de noviembre en Espacio Abierto.

«Me interesa por su capacidad para sobrevivir en lugares extremos, en sitios imposibles, en la hostilidad. Se cuestiona la pintura, su sentido como lenguaje, pero yo la reivindico como algo más necesario que nunca, derivado de su propia naturaleza. Es algo que nos conecta con la realidad de una forma muy especial, y más en este mundo tan confuso. Un liquen, no lo olvidemos, es un bioindicador de atmósferas limpias, que es lo que más necesitamos en este momento», reflexiona el creador.

Al fondo, una de las obras de la serie 'Liquen'.

Al fondo, una de las obras de la serie 'Liquen'.M. A. SANTOS - PHOTOGENIC

En la galería de la calle Alonso Pesquera, Julio Martínez sigue haciendo evolucionar su abstracción, siempre cargada de matices, de texturas, de formas dotadas de movimiento. «Intento transmitir equilibrio y energía», apunta el vallisoletano, que rehúye de todo academicismo.

La suya es una obra levantada capa a capa, templada por el paso de un tiempo que fija y asienta cada pincelada. «La pintura tiene el poder de fijarlo», defiende mientras contempla esas formas orgánicas –unas, serpenteantes; otras, rameantes– que flotan sobre fondos rojizos, azulados o anaranjados. Y en ese tiempo suspendido uno no sabe si esos cuerpos flotantes –nunca tan cargados de detalles como en esta serie–, casi danzantes, irrumpen sobre la superficie o se disponen a desaparecer ante el espectador.

Una imagen de la galería con la serie de Julio Martínez.

Una imagen de la galería con la serie de Julio Martínez.M. A. SANTOS - PHOTOGENIC

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