Pérez Antolín condensa la esencia de su literatura aforística
Presenta en un volumen la «médula» de su «producción literaria», desde ‘Profanación del poder’ hasta ‘La serenidad por fin’
![Portada del libro.](https://imagenes.diariodevalladolid.es/files/image_large/uploads/2024/03/15/65f39d70c4583.jpeg)
Portada del libro.
El escritor Mario Pérez Antolín (Stuttgart, 1964) presenta «la médula» de su «producción literaria» en un único volumen, Mínima esencia (coeditan Thémata y Apeadero de Aforistas), en el que por primera vez reúne, en sentido estricto, sus aforismos. «El lector que se anime a leer este libro encontrará, antes que ejercicios de ingenio, ocurrencias varias o frases lucidas, un catálogo de pensamientos intensos que no dan la espalda, cuando procede, a la emotividad poética. Agudeza, lirismo, cognición y síntesis son los cuatro componentes fundamentales de todo buen aforismo que se precie», señala el autor en relación a la publicación.
A diferencia de lo que pudiera ocurrir en títulos como Profanación del poder (Los Libros del Lince, 2011), su irrupción en el género, o La más cruel de las certezas (Baile del Sol, 2013), donde el lector podía disfrutar del ir y venir que Pérez Antolín ofrecía por distintos subgéneros de la escritura fragmentaria –desde poemas en prosa hasta microensayos y relatos fugaces–, en Mínima esencia se impone el fogonazo y la reflexión certera. Manda el deseo de «expresar lo máximo mediante lo mínimo», como advierte en el prólogo del libro el escritor y filósofo Ignacio Gómez de Liaño.
«La variedad de temas y de enfoques que en Mínima esencia aparecen, además de romper la monotonía de un minimalismo reiterativo, expande, a mi juicio, la comprensión fenomenológica de la realidad; objetivo último de cualquier texto, por mínimo que sea, que se mueva entre lo literario y lo filosófico», abunda Pérez Antolín, que para la editorial sevillana ha cribado las páginas de volúmenes como los antes citados, o de títulos como Oscura lucidez (Baile del Sol, 2015), Crudeza (Editorial Trea, 2018), Contrariedades (La Isla del Siltolá, 2020) y La serenidad por fin (La Isla del Siltolá, 2023).
«¿Cuáles son los asuntos que más le inquietan, estimulan, incitan a Pérez Antolín? No es fácil resumirlos, pues, obviamente, Mario Pérez Antolín no pretende construir un sistema. No obstante, hay algunos que me parecen esenciales en Mínima esencia. Esos asuntos son: El Yo -o sea, el propio autor-; la persona y las relaciones humanas y sociales; Dios y algunos aspectos de la política y la religión; y el conocimiento y la verdad», apunta Gómez de Liaño.