Raúl Allén atrapa la vida en un divertimento de trazos rápidos

Empezó siendo un divertimento durante el confinamiento, cuando todos empezábamos a salir a la calle por unos minutos; una suerte de juego «para calentar la mano» que ha acabado cobrando vidas insospechadas: desde un proyecto de publicación a una exposición que hasta el próximo 2 de enero ya se puede contemplar en el local de Errante Tattoo (calle Santuario, 23). Se trata de #Idrawyou . El ilustrador vallisoletano Raúl Allén (1979) que atrapa la vida en decenas y decenas de dibujos rápidos hechos a tinta.

«Comencé a dibujar mientras caminaba en aquellos días. Me enganchó a conectar con la gente a través de las redes sociales, y un día que llovía a lo bestia empecé a pedir fotografías... No tenía más pretensión que la del simple estudio de poses, de vestimentas», explica a este diario Allén, que por entonces andaba enfrascado en el segundo volumen de Dune o en diversos encargos como portadista. «Disfruté mucho sintiéndome tan libre con los trazos y tratando con la gente». celebra.

La serie comenzó a crecer –ha reunido cerca de 200 trabajos que van renovando la muestra en Errante Tattoo– y a definirse. Sus figuras no tienen rostro, como tampoco nosotros en aquellos días de mascarillas obligatorias . «Cada uno gesticula de una forma. Nos podemos reconocer hasta en la forma de andar. Nos expresamos con el cuerpo y nos mostramos con los ropajes. Eso es muy interesante», reflexiona el artista.

Dibujos rápidos. Páginas entintadas sin pausa, construyendo las figuras directamente. «El trabajo desde la observación es lo que más me gusta, como haciendo una interpretación de lo que veo, simplificando formas, jugando con el trazo, buscando una estética muy gráfica», detalla Allén, que no abandona el lápiz ni cuando deja de trabajar. «Soy un poco adicto, pero es que el dibujo es mi manera de enfrentarme al mundo. Este proyecto tenía algo de terapia, de soltar la presión de trabajar en el cómic, que no siempre es tan divertido como parece . El juego es fundamental a la hora de trabajar y de dibujar: hay algo de eso cuando uno piensa cómo va a hacer una mancha o con qué va a hacer un trazo. Es fundamental poder disfrutar del proceso», sentencia el ilustrador.