Báñez: «Otras regiones y administraciones han aprendido del Diálogo Social de Castilla y León»

La ministra de Empleo, Fátima Báñez, afirmó ayer que el diálogo social constituye «una pieza esencial en el engranaje institucional» de España que se practica «de manera excelente» y «con gran profundidad» en Castilla y León «todos los días». A su juicio es una «experiencia positiva» de la que han aprendido «otras administraciones públicas y otras comunidades autónomas», señaló durante su intervención para clausurar la ‘Jornada de Presentación del Diálogo Social en Castilla y León’ que tuvo lugar en la sede del Consejo Económico y Social de España (CES).

«Creo profundamente en la importancia del diálogo social y a concertación social», dijo Báñez en presencia del presidente de la Junta, Juan Vicente Herrera. A juicio de la ministra es un «instrumento útil de la política social» que los ciudadanos perciben como lo mejor para defender “sus intereses diarios en la mejora del empleo y la política social en España».

«Eso lo hace manera excelente Castilla y León», dijo antes de felicitar al presidente de la Junta y a los interlocutores sociales de la Comunidad que, añadió, «lo practican con una gran profundidad». Por eso considera que «no son una casualidad los más de cien acuerdos alcanzados» ni que «otras administraciones públicas y otras comunidades autónomas aprendan de esa experiencia positiva», informa Ical.

En este sentido, y en clave nacional, pidió a las centrales sindicales y organizaciones empresariales que a que renueven «sus acuerdos de negociación colectiva y de flexibilidad interna». A su juicio eso redundaría en una mayor «estabilidad» para garantizar mayor crecimiento económico y oportunidades para todos. «Queremos competir con lo mejor que tenemos que es el talento, el capital humano, porque es el mayor activo estratégico que tiene España y este necesita ir bien acompañado del diálogo social y del Gobierno», señaló al respecto.

Según añadió, el diálogo social sirve para centrarse en los objetivos importantes como son el empleo, el crecimiento de la economía y la mejora del Estado de bienestar. «No queremos que nadie se quede atrás», señaló antes afirmar que para eso el diálogo entre los agentes sociales y el propio Gobierno es «un instrumento útil de la política social, pero también significa una pieza esencial en el engranaje institucional de nuestro país y para los ciudadanos».

En este sentido, la ministra destacó el «papel relevante» que tienen los interlocutores sociales y el diálogo social «en la España de hoy» como complemento a la actividad parlamentaria. A lo largo de los últimos 40 años el diálogo social, añadió, ha hecho «fructíferas contribuciones» a nuestro país.