«Debemos colaborar y reducir tensiones entre industria, distribución y los agricultores»

Pregunta .- ¿Funciona adecuadamente la relación de la industria con el sector primario, con agricultores y ganaderos? ¿Existe la debida interlocución para trasladarles sus necesidades y ellos las suyas?

R .- Esa es una de nuestras prioridades en el Plan Estratégico. Hay que reconocer que no la hemos podido abordar suficientemente porque nuestros recursos son limitados. Hemos trabajado en el plano de divulgación la importancia de la repercusión que tiene la Ley de la cadena alimentaria. Esta ley es muy importante para la industria porque implica que las relaciones con el sector primario tienen que estar debidamente reguladas, debidamente formalizadas y cumplir una serie de normas. Y lo mismo entre la distribución y la industria. Esta ley nos marca un rumbo que parece que en lo formal sólo es que haya contratos, pero está promoviendo de forma muy clara que haya una mayor cultura de colaboración a lo largo de la cadena para atender cada vez mejor las necesidades de los consumidores. Es muy importante que por encima de las dificultades, de las tensiones, de las peleas que pueda tener la industria con el sector primario o las que pueda tener la industria con la distribución busquemos fórmulas de acuerdo, de colaboración para dar una mejor respuesta a los consumidores. Y, además, con la administración, que puede jugar un papel de arbitraje y suavizar las tensiones que se producen. Nos parece una buena iniciativa la creación de un consejo de diálogo entre la junta y las organizaciones agrarias. Nosotros queremos participar ahí.

P .- ¿Vitartis va a plantear la entrada en ese consejo?

R .- Seguramente. Es un marco bastante interesante para cumplir con ese objetivo del plan estratégico que no hemos podido abordar. La cultura de colaboración con el sector primario es fundamental.

P .- ¿Por qué no ha sido posible esa colaboración?

R .- Porque nuestros recursos son limitados. El conflicto de la leche era lo suficientemente complejo y tenso para que las condiciones no fueran las adecuadas. Hay marcos en los que es más fácil tratarlos. En un marco regional es más fácil, pero en el europeo, que nos supera a todos, es más difícil obtener frutos.

P .- Se ha hablado mucho de las imposiciones de la distribución a la industria y al sector primario. ¿Hay demasiada prepotencia de la distribución con ambos?

R .- No se puede generalizar. Hay personas, organizaciones y momentos en los que el que tiene poder trata de ejercerlo. Pero la forma más inteligente de ejercer el poder es tratar de hacerlo de manera sostenible. Eso implica que debe desarrollar estrategias colaborativas a lo largo de la cadena. Si la distribución se dedica a jugar con la industria y la industria con los agricultores, no tendremos agricultores ni industria. Si la distribución es inteligente debe buscar fórmulas colaborativas con la industria y los agricultores. Este planteamiento empieza a tener su peso e importancia. La administración puede facilitar el encuentro y lo acuerdos.

P .- ¿Por qué el agricultor y el ganadero sigue siendo reticente a crear proyectos industriales?

R .- Hay experiencias de todo tipo. Hay unos que han dado saltos a actividades industriales que han acertado y otros que no. Las experiencias de fracaso actúan como lastre para frenar nuevas iniciativas. A veces es mejor para un agricultor ser muy bueno en lo que conoce y no dar un salto a otra actividad. Esto tiene un riesgo muy grande.

P .- Pero sería bueno que se lo planteen…

R .- Que lo reflexionen. Para competir de verdad lo importante es estar muy especializado, porque es el corazón del negocio.

P .- ¿Hay que comprar productos de la tierra?

R .- Sí, pero hay veces que una industria no se puede circunscribir solo a productos de la tierra.

P .- ¿Hay conciencia suficiente del papel que el sector puede jugar para mantener el medio rural?

R .- Cada vez más el medio rural demanda industrias relacionadas con la actividad agraria.