La Junta garantiza “prudencia y rigor” en la tramitación del proyecto de la mina de uranio de Retortillo

La Junta de Castilla y León garantizó hoy “prudencia y rigor” en un proyecto “tan sensible y complejo” como la autorización para la apertura de una mina de uranio en la localidad salmantina de Retortillo, y aseguró que Manuel Lamela, exalto cargo del Gobierno, “no ha estado para nada” en la Comunidad ni en la sede del Ejecutivo.

En la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno, después de que el procurador de IU, José Sarrión, pidiera la paralización del proceso y conocer la relación de Lamela, 'lobista' de la empresa ante la Comisión Europea, con la rapidez en la aprobación de la Declaración de Impacto Ampiental, Valdeón explicó que la tramitación administrativa no ha terminado porque faltan informes.

Al respecto, precisó que la Comisión Territorial de Medio Ambiente ha pedido informes al ayuntamiento de Retortillo en relación a la autorización de suelo rústico y subrayó que la empresa lo ha recurrido al entender que “se pueden lesionar sus derechos”. “El expediente no ha finalizado, es muy riguroso y exquisito en todos los planteamientos; y poco más tenemos que decir”, indicó.

Después de manifestar que se trata de una autorización supranacional, que pasa primero por el Euraton, después por el Consejo de Seguridad Nuclear y luego por la Junta incluido el consistorio, manifestó, ante la critica de IU, que la Declaración de Impacto Ambiental ha sido igual, en el tiempo, que para cualquier otro expediente.

“El proyecto se estudia con el máximo rigor, tiene que pasar todos los filtros y se está en esa fase”, señaló en relación a la petición de PSOE e IU de su paralización para hasta aclarar el efecto de la intervención de Lamela ante la Comisaria de Energía que dirige el exministro Miguel Arias-Cañete, de quien fue 'número dos' en el Ministerio de Agricultura.

Valdeón aseguró, de manera tajante, que conocen la actividad de Manuel Lamela por los medios de comunicación y añadió que “no ha estado para nada” ni en la Comunidad ni en la sede de la Junta. Respecto de que en la declaración de impacto no se hayan atendido las recomendaciones del CSN en relación a los residuos radiactivos de este proyecto, señaló que es un trabajo de los técnicos, no de los políticos, y que éstos son “escrupulosos" al redactar sus informes.