Los antepasados de Almenara, en 3D

Las campañas arqueológicas y los estudios históricos llevados a cabo en los últimos años en el yacimiento romano de Almenara-Puras ya permiten al visitante recorrer un asentamiento del siglo IV y adentrarse en la forma de vida de los antepasados a partir de los vestigios excavados pero ahora, con las nuevas tecnologías como grandes aliadas, el público podrá realizar un viaje en el tiempo mucho más real gracias a las recreaciones en tres dimensiones que se van a llevar a cabo.

Las Villas Romanas se someterán en los próximos meses a un proceso de reconstrucción digital a fin de conseguir una reproducción global de las instalaciones en su conjunto y se realizarán réplicas virtuales de algunas de las piezas más significativas del enclave para que en el primer trimestre del próximo año –si no se dilatan las previsiones–, este recurso gestionado por la Diputación de Valladolid resulte más atractivo a nivel turístico.

Visores en 3D, impresión tridimensional a escala de los restos de la villa, recursos interactivos, texturizados fotorrealistas, reconstrucción de objetos a mayor escala que la original o inclusión de ‘hologramas’ de personajes, escenarios o mobiliarios son algunas de las mejoras que se van a implementar gracias a un proyecto piloto basado en el aprovechamiento de las nuevas tecnologías.

La institución provincial, promotora de este centro que abrió sus puertas el 3 de mayo de 2003 –es decir, está a punto de celebrar su décimo sexto aniversario– acaba de impulsar este original proyecto gracias a la financiación del programa Poctep de la Unión Europea, entre cuyos objetivos destaca el uso de los TIC para «lograr una integración del territorio rural en un mundo global competitivo».

Se trata de un programa entre España y Portugal destinado a «fomentar la innovación y modernización territorial», que plantea el uso de las nuevas tecnologías para desarrollar plataformas de «soluciones innovadoras»; precisamente lo que se pretende en las Villas Romanas de Almenara-Puras, según detalla la Diputación en la memoria justificativa para avalar esta intervención, incluida dentro de la línea vinculada al turismo y el patrimonio.

De hecho, apuesta por convertir las nuevas tecnologías en herramienta de comunicación para la difusión de los recursos, en este caso culturales, y ensalza la importancia de este proyecto piloto para crear «una oferta diferenciada» que logre «mejorar la experiencia de la visita al museo, renovando y adaptando los recursos del mismo a las nuevas tecnologías para impulsar su difusión y acercamiento al público».

En total, la Diputación de Valladolid ha estimado una inversión que roza los 40.000 euros –en concreto, 39.513,16 euros, incluyendo el IVA–, de los cuales la mayor parte se destinará a la creación en conjunto de la villa. La partida abarca también la virtualización de los restos, la impresión de objetos y las recreaciones tridimensionales, así como la campaña de promoción.

Para llevar a cabo la virtualización en aras «de mejorar la experiencia de la visita» y de favorecer el «acercamiento al público», se utilizarán los restos existentes como punto de partida y, a partir de ellos, se realizará un «levantamiento de volúmenes básico y texturizado fotorrealista» para que quienes se desplacen hasta este enclave situado en el sur de la provincia puedan hacer «una inmersión lo más sugestiva posible del momento histórico y de la vida cotidiana de la villa».

Además, habrá un ‘Museo Virtual’ que, en un primer momento, abrirá sus puertas con seis objetos «simbólicos o representativos», si bien el propósito es ir ampliando la colección y darla a conocer en redes sociales, también con el objetivo de que la difusión tenga incidencia en la llegada de más visitantes.

Los restos que se van a digitalizar gracias a la impresión en tres dimensiones corresponden útiles relacionados con la agricultura y a elementos domésticos de tipo cerámico, como vajillas, o metálico, por ejemplo adornos personales. Réplicas de algunos de los objetos más significativos, algunos a mayor escala, para contextualizar el yacimiento.

Y, puesto que el plan piloto se sustenta en el aprovechamiento de las nuevas tecnologías, los nuevos contenidos que se elaboren estarán colgados y enlazados con la aplicación de la Red de Villas Romanas de Hispania, una entidad nacional de la que forma parte el yacimiento vallisoletano.

El menos visitado

Una vez desarrolladas las mejoras, después de unos trabajos que se prolongarán durante seis meses –a partir de que se firme el contrato con la empresa que resulte adjudicataria de un proceso aún en licitación–, habrá que comprobar si los nuevos reclamos virtuales tienen incidencia en el público pues, en la actualidad, las Villas Romanas son el recurso turístico menos visitado de los ocho que gestiona la Diputación de Valladolid, con una cifra que se sitúa en torno a los 17.600 visitantes al año.