La tromba de agua de Martinho deja una semana sin luz al colegio Antonio Machado de Valladolid

Tres días llevan sin suministro eléctrico en el colegio Antonio Machado y la solución no llegará hasta la próxima semana. Desde que los niños entraron el lunes en el centro educativo tienen que seguir las lecciones con la luz apagada, están sin calefacción en las clases, no funcionan las pizarras digitales, los docentes no pueden conectar dispositivos y la empresa que gestiona el catering del comedor se ha visto obligado a acercar las bandejas justo cuando debería sonar el timbre de salida, para que los usuarios coman caliente –o, al menos, templado–.

Este jueves será la cuarta jornada que sufran las consecuencias de una avería registrada el fin de semana a causa de la tromba de agua y, ante la ausencia de una alternativa que les permita funcionar con normalidad mientras se arregla, las familias de este centro público ubicado en Pilarica han elevado sus quejas porque consideran que el problema ya se tenía que haber atajado.

«Entendemos y lamentamos la situación sobrevenida por falta de luz [...] así como las condiciones en las que se está desarrollando estos días la actividad lectiva», les han contestado desde el Ayuntamiento, antes de insistirles en que «están haciendo acopio de material y de maquinaria» con el objetivo de «revertir la situación en el menor tiempo posible».

Según confirmó a este periódico la concejala de Educación, Irene Carvajal, la empresa que se encarga del suministro de este tipo de material para el Consistorio, Cadielsa, ya ha conseguido los 250 metros de cableado que se necesitan para sustituir la instalación, y los operarios comenzarán de inmediato las obras con el objetivo de que el lunes el Antonio Machado tenga restablecido el suministro eléctrico y pueda funcionar con normalidad.

«El cableado eléctrico es bastante deficiente y antiguo y, con motivo de la tromba de agua del sábado y del domingo, ha colapsado y se ha estropeado», explicó la edil responsable del área sobre las causas que han originado esta situación, después de considerar que se trata de un «caso fortuito» que han tratado de afrontar con la máxima celeridad posible.

Sin embargo, no han aportado una alternativa, como se planteó desde la comunidad educativa para hacer frente al ‘apagón’. La edil responsable del área explicó que no ha sido posible recurrir a un generador porque no disponen de uno tan potentes y, si hubieran tenido que pedir uno capaz de abastecer al colegio, habrían tardado dos semanas en recibirlo. Además, Carvajal insistió en que los técnicos «desaconsejaron» su uso porque «el ruido que emitiría sería tan fuerte que impediría la actividad normal del colegio e incluso el descanso de los vecinos».

Así que los alumnos de este centro de Educación Infantil y Primaria han tenido que reforzar su indumentaria en estos días –e incluso llevar ropa térmica, detalló la presidenta de la AMPA, Alicia Sánchez– porque no han podido encender la calefacción, mientras el grado de preocupación ha ido creciendo entre las familias con el paso de los días, temerosas de que con el cambio de hora los usuarios del servicio de Madrugadores estén a oscuras a partir del lunes.

Además, aunque los progenitores agradecen a la concesionaria del comedor que traiga todos los días los menús a las dos de la tarde, justo cuando comienza el servicio, los platos pierden temperatura en el trayecto que realizan desde el polígono de San Cristóbal y después ya no tienen posibilidad de calentarlos en el horno del colegio.

Con las inminentes obras para la restitución del cableado, desde la Concejalía de Educación confían en que el lunes el Antonio Machado recupere la normalidad después de los estragos de una semana caracterizada por la carga administrativa, teniendo en cuenta que está abierto el periodo de admisión para el próximo curso y que se han resuelto los listados provisionales del programa Releo.