El encanto de la Milla de Oro del Vino, provincia de Valladolid, ha vuelto a seducir a celebrities y personalidades que se acercan a disfrutar de este enclave vitivinícola referente a nivel mundial. La última ha sido Tamara Falcó, la Marques de Griñon, e hija de Isabel Preysler, visitaba Abadia Retuerta LeDomaine junto a su marido Íñigo Onieva, y unos amigos, en una desconexión de dos días en este hotel de lujo en Sardón de Duero. 

Un enclave que Falcó conocía de su participación en MasterChef Celebrity. Fue en noviembre de 2019 cuando el popular concurso televisivo hizo parada en la Ribera de Duero tupiendo que preparar un menú a base de lechazo de Castilla y León, Lentejas de Tierra de Campos, Manzana Reineta del Bierzo, Pan Candeal de Valladolid, Setas de Castilla y León, miel, Mantequilla de Soria, que fue degustado por una treintena de profesionales del sector del vino de la región. 

Una experiencia que Falcó calificó como «un auténtico desastre» en el que portó la doble capitanía. Pero no fue su anterior visita, ya que como ella mismo reconoció ya había estado con su marido antes de contraer matrimonio. 

Una pareja que vive en una luna de miel eterna en la que, aseguran pudieron «disfrutar tranquilamente y a aprender sobre la maravillosa cultura del vino en la Ribera del Duero… Todo ello me recuerda tanto a mi padre y le doy gracias por haberme inculcado el amor por la tierra y por los maravillosos caldos que se crean en nuestra maravillosa tierra».

La celebrity heredó de Carlos Falcó también unos viñedos aunque es su hermana Sandra la que dirige la bodega. Ella, con formación gastronómica tras su triunfo en MasterChef, sigue siendo un gancho para las marcas, prueba de ello es que la difusión del contenido alcanzó a 1.5 millones de seguidores solo en Instagram, donde más de 20.000 interactuaron con las publicaciones.