Diario de Valladolid

El hombre que mató a su mujer acudió a trabajar a Hacienda a pesar de estar confinado por Covid

El agresor se saltó la cuarentena y fue ese mismo día por la mañana a su trabajo en la Delegación autonómica, luego regresó a casa y asestó doce puñaladas a su mujer de la que se estaba separando

Amigas de las hijas del matrimonio, desconsoladas, en la concentración de ayer en la trasera del Consistorio  J.M. LOSTAU

Amigas de las hijas del matrimonio, desconsoladas, en la concentración de ayer en la trasera del Consistorio J.M. LOSTAU

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Íñigo Arrúe
Valladolid

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La mujer asesinada en la urbanización Santa Ana de Valladolid llegó al hospital con casi nulas esperanzas de sobrevivir, ya que a simple vista le reconocieron doce heridas de arma blanca en el tórax, según informaron ayer fuentes de la investigación del caso, que añadieron que ambos estaban contagiados por Covid y obligados a guardar confinamiento, pese a lo cual, ese mismo día, por la mañana, el supuesto agresor acudió a su trabajo como técnico en la Delegación de Hacienda de Valladolid. 

África Cuadrado, la mujer asesinada en su chalé del número 37 de la calle Montreal de la urbanización y su marido, el presunto agresor, se encontraban en trámites de separación. «Vivían bajo el mismo techo, pero se estaban separando», explicó ayer el subdelegado del Gobierno, Emilio Álvarez, antes del comienzo del minuto de silencio en memoria de la fallecida. Un sentido acto al que acudieron las principales autoridades políticas locales y provinciales y amigas de las dos hijas del matrimonio.

La agresión se produjo sobre las 16.40 horas y fue presenciada por la hija mayor del matrimonio, de 18 años. El marido, J.J.F.C., de 58 años, utilizó un cuchillo de cocina y asestó «numerosas» cuchilladas a su mujer en el tórax. Un arma blanca que fue localizada e intervenida por el Cuerpo Nacional de Policía (CNP). «En la casa había más cuchillos, pero el usado en las puñaladas fue ese», indicaron fuentes policiales, descartando el uso de más de una arma blanca. 

La mujer, que perdió mucha sangre, fue evacuada en una UVI Móvil de Emergencias Sanitarias de Sacyl al Hospital Clínico Universitario. Eran las 16.45 horas. Los esfuerzos por salvar su vida se centraron en una larga intervención quirúrgica, pero enlazó varias paradas cardíacas. Murió finalmente en torno a las 21 horas.

Cuando llegó al hospital presentaba doce cuchilladas visibles. La autopsia practicada ayer por la mañana en el Instituto Anatómico Forense, revelará el número de lesiones por arma blanca. Ayer no trascendió el número de punzadas.

Su marido, J.J.F.C., y  trabajador de Hacienda en el cuerpo técnico de inspectores, fue trasladado a su vez  al Hospital Universitario Río Hortega (HURH), en calidad de detenido, pero con lesiones superficiales en los brazos. Fueron cortes que se autoinfligió tras la brutal agresión a su mujer. Unas heridas de tan escasa entidad que llevaron a darle de alta al poco de ingresar. Su siguiente destino fue el módulo de detenidos del Hospital Clínico, donde aún permanecía ayer, ya que el HURH carece de dependencias para arrestados.

Si no pasó ayer a disposición judicial, es que porque está contagiado por Covid y serán los médicos cuando determinen en qué momento declarará ante el titular del Juzgado de Violencia sobre la Mujer. El acusado del asesinato y su mujer estaban contagiados por coronavirus y confinados en su domicilio, según confirmaron a este periódico fuentes de la investigación. El contagio por Covid. 

En principio, estaba previsto que hubiera recibido el alta en la tarde del martes, toda vez que sus heridas eran leves, y que inmediatamente pasara al módulo hospitalario de reos para que se le tomara declaración y posteriormente fuera puesto a disposición del Juzgado de Violencia sobre la Mujer.

Ahora, tras saberse que está contagiado por Covid, todo este proceso se demorará hasta que las autoridades sanitarias determinen su alta o bien que pueda. Es más, no se descarta que no declare ante la Policía Nacional y se le envíe directamente a prisión preventiva, a decir de las  mismas fuentes, algo que debería determinarlo, eso sí, el juzgado de acuerdo con las autoridades sanitarias.

Feliz por la mañana

El presunto asesino celebró sólo cuatro horas antes, a mediodía, que su hija mayor de 18 años iba a entrar en el grado que ella había elegido en la UVA. Lo hizo en su lugar de trabajo. Incomprensiblemente, se saltó la cuarentena. 

Así lo trasladó a sus compañeros de trabajo, la Delegación de la Agencia Estatal de Administración Tributaria (AEAT) de la avenida de Salamanca. J.J.C.F., de 58 años, al que todos conocen como Javier, pertenece al cuerpo técnico de la Inspección de Hacienda, y su destino es la oficina técnica. De hecho en Hacienda se enteraban del crimen cuando la policía acudía en la mañana de ayer al lugar de trabajo del presunto asesinos.

Los compañeros, impactados por el suceso, aseguran que hasta le fecha nada hacía presagiar que iba a ser protagonista de un hecho tan trágico. «Siempre ha destacado por ser una persona tranquila, educada y correcta. Ha sido una sorpresa para todos», reiteraron las fuentes consultadas. 

Y menos aún cuando a mediodía del lunes, fecha de autos, estaba feliz participando a sus compañeros que su hija mayor había aprobado la Ebau y con una calificación que le garantizaba entrar en la carrera elegida en la UVA, grado que omite este diario para proteger a la hija. 

El crimen del hostal 

La Delegación del Gobierno emitió ayer un balance de mujeres víctimas de violencia de género en la Comunidad, en que recoge dos víctimas mortales en el presente año: el caso de Mansilla de las Mulas el 19 de abril y el registrado el lunes en Valladolid. La realidad, por desgracia, se impuso al la estadística, y en la mañana de ayer tuvieron que agregar la agresión muy grave a una mujer en Doñinos (Salamanca). 

De forma sorprendente, el estadillo no recoge la muerte por asfixia de P.I.R.B., de 41 años, fallecida el 4 de febrero de 2021 en la pensión ‘Vianesa’ de la calle Montero Calvo, 1, de Valladolid, a manos, presuntamente de su pareja, J.A.S., que se fugó del hostal y fue detenido 65 días después en Tudela (Navarra) en ingresó en prisión. 

El subdelegado del Gobierno, Emilio Álvarez, explicó que el caso de la mujer asesinada en la pensión no figura en el balance de mujeres asesinadas víctimas de violencia de género en Castilla y León en 2021, porque el sistema de Viogen no ha constatado esta muerte todavía. «Mientras la Delegación de Gobierno no lo confirme, no lo puede tener en cuenta», afirmó.

Durante el acto de condena por el último asesinato en Valladolid, el alcalde de la ciudad, Óscar Puente, calificó el suceso de  terrible y doloroso» y  subrayó que la violencia de género es un asunto «complejo» que exige «la implicación de toda la sociedad» así como «una respuesta firme de todos».

El delegado del Gobierno, Javier Izquierdo, recaló que la violencia de género deja unas cifras «insoportables e insufribles», con dos víctimas confirmadas en Castilla y León en lo que va de año, y 55 desde 2003, año en el que se comenzaron a recopilar estadísticas sobre esta lacra, que suman en todo el país 1.099 mujeres asesinadas, informó Europa Press. Además, a este caso se unió en la madrugada del martes otra agresión de género que se ha saldado con una mujer herida grave en Salamanca y su pareja fallecida tras suicidarse.

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