Un vallisoletano a por el delantal de campeón

Valladolid ha vivido la revolución de la alta cocina en los últimos años. Chefs con estrella como Miguel Ángel de la Cruz (La Botica Matapozuelos) o Víctor Martín (El Trigo) son reconocidos en medio mundo. Peña, después de pasar por un concurso de talentos, es un rostro muy conocido de la pantalla. El campeonato de pinchos se ha convertido en todo un Mundial gastronómico donde se dan cita los mejores creadores. Y parece que este gran momento tiene continuidad, solo hay que verlo en la mejor cantera de cocineros de España, Masterchef Júnior, el programa de TVE, para comprobarlo. Si el año pasado fue María Arias la representante pucelana, este año el que se mueve como pez en el agua entre los fogones es Jaime Pérez González.

En el rótulo del programa aparece que es de Ibiza, y no miente, ya que nació allí, (abril de 2007) pero con solo un año se vino a vivir a Valladolid, lugar de nacimiento de su padre, mientras que la parte balear le llega por su madre. Desde el primer día se ha ganado el cariño de todos los espectadores con su ingenio y su espontaneidad. Hoy, se jugará su pase a la gran final. Y lo hará en territorio amigo, ya que las cocinas de ‘MasterChef Junior’ se trasladarán a Palencia, donde los aspirantes cocinarán junto a la Catedral de San Antolín, conocida como la Bella Desconocida. Jaime tendrá que trabajar junto a sus compañeros en un único equipo y con un único capitán haciendo un homenaje a las recetas tradicionales de la zona, reproduciendo un menú diseñado por el chef Roberto Terradillos (una estrella Michelin). Utilizarán algunos de los mejores productos locales como la morcilla de Villada, la trucha ahumada, las setas o el queso, avalados por Tierra de Sabor. Los platos serán catados por 22 comensales exigentes, perfeccionistas y muy especiales: sus abuelos. En la última prueba, se enfrentarán a tres cajas misteriosas que esconden platos típicos italianos.

Antes, los Reyes Magos dejarán en las cocinas diferentes cajas con ingredientes muy variados. Los aspirantes podrán abrir tantas como quieran, pero obligatoriamente cocinarán con todos los productos que descubran. Santiago Segura, aspirante de la pasada edición de ‘MasterChef Celebrity’, les ayudará a hacer emplatados divertidos usando una impresora 3D.

«Era mi sueño. Hace años que veo ‘MasterChef’, y siempre he querido participar. En casa hemos visto todas las ediciones: ‘MasterChef’, ‘MasterChef Junior’ y ‘MasterChef Celebrity’. ¡Nos encanta! Me gusta mucho cocinar y hace un par de años que practico en casa algunos fines de semana. Este verano, en Ibiza, mis amigos me animaron a apuntarme (¡y a mis padres!) y al final me decidí a hacerlo», explica el alumno del Colegio Internacional, que ha logrado que Valladolid e Ibiza están unidos por el seguimiento que realizan en el programa.

Sea cual sea el resultado, Jaime se llevará una experiencia muy gratificante, además fue elegido entre un casting formado por más de 6.000 niños y niñas de toda España. «He ganado un montón de cosas. Además de cocinar más y mejor, a hacer muchos platos nuevos. También a trabajar en equipo, que es difícil a veces, y a organizarme el tiempo y las tareas. Y a compartir y a intentar ser buen compañero. Ha sido muy buena experiencia convivir y viajar todos juntos», comenta. El vallisoletano ha hecho muy buenos amigos y ya avanza que se verán más veces, incluso con algunos ya ha realizado una quedada para comer verse “pronto” en un restaurante.

Jaime se ha convertido en todo un chef de cocina, por eso en su menú nunca faltaría «la pasta» y «los guisos de mis abuelas». Aunque su lado más vanguardista le sale cuando hable de «platos exóticos» que le gusta probar en restaurantes, sobre todo «cosas con especias y salsas picantes».

Su paso por los fogones de La1 le han convertido en todo un experto, por eso, recomienda un menú, eso sí, no apto para principiantes. «Para empezar, un brócoli frito con salsa kimchi y comino ahumado, con un aire de lima. Después, un solomillo de venado con esferificaciones de tamarillo, que es un tomate especial, y rúcula. De postre, un bizcocho de aceite de oliva, con una crema de limón y un crumble de mantequilla y oliva negra en polvo. ¡De rechupete!».