«El uso del gas natural mejorará el aire de nuestros pueblos y ciudades»

El gas natural convivirá con la electricidad y con otras energías, pero será determinante «para mejorar la calidad del aire de nuestros pueblo y ciudades». No será excluyente, porque avanzar hacia un modelo energético sostenible y limpio de emisiones pasa por «diversas alternativas que remen en la misma dirección». Así lo planteó ayer Nuria Rodríguez, directora general de Negocio Distribución Gas España, para quien el gas natural es clave en la transición a la economía baja en carbono.

Rodríguez dejó ayer claro que el gas natural vehicular es una realidad y que el gas renovable o biogás es una apuesta de futuro que su compañía ha comenzado a desarrollar.

La directiva de Gas Natural abrió la mesa redonda del Club de Prensa de EL MUNDO DE CASTILLA Y LEÓN, advirtiendo de que «el progreso económico y medioambiental deben ir de la mano y ser perfectamente compatible». En esa dirección, describió el papel de su compañía en «ser un agente dinamizador de los sectores productivos locales, facilitándoles una energía eficiente desde el punto de vista económico y ambiental». De ahí que Rodríguez citara tres beneficios fundamentales para la industria y a los particulares: es un combustible limpio, con menos emisiones de contaminantes; aporta eficiencia, estabilidad de precios y competitividad, y garantizar el suministro continuo.

Recordó que la Agencia Internacional de la Energía la ha calificado como «la mejor energía puente entre la sociedad de los combustibles líquidos del siglo XX a la sociedad de las renovables de la segunda mitad del siglo XXI». Según Rodríguez, el gas natural tiene gran futuro. Sobre todo en Castilla y León, donde cuenta con infraestructuras desarrolladas para crecer en consumo industrial y doméstico. Como energía limpia «es el único capaz de entrar en funcionamiento cuando es imposible usar las renovables porque no hay sol y viento».

Su intervención se centró de manera especial en el impacto que provoca el transporte por carretera, que, según la Organización Mundial de la Salud, provoca el 65% de la contaminación urbana y numerosas muertes prematuras cada año. «El gas natural puede contribuir positivamente a reducir esta contaminación», dijo.

A su juicio, el gas natural vehicular es «el único que dispone de soluciones desarrolladas y operativas para los servicios de larga distancia». La directiva de Gas Natural se refirió sobre todo a la mejora de calidad del aire que implica la movilidad. Los motores a gas natural vehicular reducen en un cien por cien las emisiones de NO2 en el aire, rebajan hasta un 85% las de óxidos de nitrógeno, un 30% las de dióxido de carbono y no emiten dióxido de azufre. Además, producen la mitad de ruido y menores vibraciones que el diesel. Y gastan menos, según Nuria Rodríguez. Además, según detalló, es un 50% más barato que la gasolina y su precio es un 30% inferior al diesel. «Un camión que llena el depósito con 100 euros recorrería 255 si usara gasóleo y hasta 357 kilómetros si el combustible fuera gas natural». De la misma manera, precisó que «un coche particular puede recorrer con 20 euros 275 kilómetros si utiliza gasolina, 375 con gasóleo y 555 si el combustible fuera gas natural».

La matriculación de vehículos propulsados por Gas Natural aumentó un 133% en 2016 en España. «Nos queda mucho camino por recorrer en España y en Castilla y León» si nos comparamos con Italia». Salamanca Y Burgos ya cuentan con autobuses urbanos y de recogida de residuos a través de gas natural, y Valladolid y Segovia «avanzan en proyectos para lograrlo».

GAS RENOVABLE

Si el desarrollo futuro de este gas natural para vehículos pasa porque los coches ganen autonomía y por la ampliación de gasineras, el mayor desarrollo de esta energía está en el avance del «gas renovable», que es el que se general «a partir de los residuos, que son una fuente inagotable», en palabras de Nuria Rodríguez. «Desde Gas Natural estamos haciendo una gran apuesta en investigación y en diversos proyectos pilotos para generar gas renovable a partir de residuos orgánicos o del reciclaje de aguas residuales que pueden inyectarse directamente a la infraestructura gasista existente», añadió.

A preguntas del público asistente al debate, Rodríguez eludió pronunciarse sobre el futuro del carbón. Se limitó a decir que su progresiva desaparición es una exigencia de la Unión Europea que «no podemos obviar».

Gas Natural es la filial de distribución de Gas Natural Fenosa. Su red de gasoductos supera los 53.000 kilómetros. Llevan el suministro a 5,3 millones de puntos en mil poblaciones de diez comunidades autónomas. En Castilla y León suministran a 118 municipios y medio millón de castellanos y leoneses a través de una red de 4.200 kilómetros. Son conscientes de que en esta región les queda «mucho camino por recorrer», ya que existen 3.300 comunidades vecinos con calderas centralizadas de otros combustibles contaminantes. Si reducen este parque su impacto «sería equivalente a plantar 3 millones de árboles».

GASINERAS EN TORDESILLAS, BURGOS Y SALAMANCA

El proyecto europeo ECO-GATE, que dirige y coordina Gas Natural Fenosa, implicará la construcción de tres gasineras para suministro de gas a vehículos en Tordesillas (Valladolid), Burgos y Salamanca, según desveló ayer Nuria Rodríguez. La Comisión Europea ha aprobado una financiación de10 millones de euros para desarrollar 20 estaciones en España, Francia, Portugal y Alemania. Además de las tres proyectadas en la Comunidad, Rodríguez avanzó que el consorcio que lidera su compañía construirá estaciones de servicio de gas para coches en Barcelona, Madrid, Murcia, Irún, La Junquera, Córdoba y Cartagena.

Este consorcio está integrado por operadores de gas natural, proveedores de tecnologías y servicios, usuarios finales y expertos en conocimientos de mercado y promoción de los cuatro países.

«Hoy en día, casi todos los fabricantes de vehículos domésticos e industriales disponen de motores a gas natural, pero es necesario promover e incentivar también la facilidad de acceso y la posibilidad de adaptar el vehículo actual para el uso de gas natural», destacó la directora de Negocio Distribución de Gas España. Nuria Rodríguez reveló que alrededor de 30 empresas de Gastilla y León han mostrado interés por transformar sus flotas. No obstante, considera que aún queda mucho camino por recorrer. «Hemos de conseguir con el impulso de sectores privados y administraciones públicas desarrollar las infraestructuras y medidas necesarias para el uso de esta energía». La renovación de flotas y vehículos particulares contribuirá «de manera definitiva a mejorar la calidad del aire», en palabras de Rodríguez. A su juicio, esta transformación implica un ahorro económico y de emisiones, por lo que será necesario ampliar y extender los incentivos fiscales que ya han comenzado a implantarse en algunos ayuntamiento de Castilla y León: bonificaciójn del pagi del impuesto de circulación y acceso zonas restringidas.