David Castaño: «Veo muy difícil el proyecto sin la ayuda de la Junta»

Unas declaraciones del alcalde, Óscar Puente, en las que el regidor equiparaba el impacto que tendría el parque agroalimentario para Valladolid con el que en su día supuso la apertura de la factoría de Fasa Renault fue lo que llevó al procurador de Ciudadanos David Castaño a presentar su pregunta.

A diferencia de la sorpresa que se llevó el concejal de Hacienda y Promoción Económica, al representante de Ciudadanos el rechazo de la Junta no le sorprendió. De hecho aseguró ayer que la información que tenía antes de presentar la pregunta era que no habría ayuda por parte de la Administración regional y ahora teme que el proyecto no salga adelante. «Sin el apoyo de la Junta lo veo muy complicado», dijo ayer Castaño, aunque añadió que «si el Ayuntamiento considera que tiene la capacidad de hacerlo, ojalá que sea así».

Lo que tiene claro es que el ‘no’ de la Junta es definitivo, al menos para los dos años de legislatura que quedan por delante hasta las nuevas elecciones. Castaño señaló que «tendrían que cambiar mucho las cosas» para que se produjera una cambio de actitud y los plazos lo hacen «prácticamente imposible».

Las declaraciones del alcalde a las que se refería Castaño las hizo Puente el 17 de noviembre de 2016. La hemeroteca, esa herramienta de consulta que tantas veces saca los colores a los políticos, recoge que aquel día el regidor dijo que el parque agroalimentario «será la Fasa-Renault del siglo XXI», con capacidad para 5.000 empleos cuando esté en su máximo desarrollo, aunque reconoció que en el mejor de los casos, las obras empezarían en 2020 para tener ejecutadas las dos primeras fases en 2030.

Cuestión importante a tener en cuenta es la inversión necesaria. A falta de elaborarse el plan de viabilidad, Puente dijo también ese día que el importe del proyecto rondaría los 150 millones de euros, de los que 100 le correspondería poner al Ayuntamiento en los años necesarios hasta que el complejo esté terminado.