CORRUPCIÓN MILLONARIA
Ucrania se enfrenta a los oligarcas
El Gobierno de Petro Poroshenko inicia acciones judiciales contra los grandes empresarios de la energía ayudados por el ex presidente Yanukovich
Mina de acero cerrada debido al conflicto en la ciudad de Lugansk, al este de Ucrania.-Foto: AFP / DIMITAR DILKOFF
Las autoridades judiciales de Ucrania han iniciado acciones contra los grandes empresarios a los que el anterior presidente Viktor Yanukovich otorgó el control de las empresas energéticas más valoradas del país. La medida del Gobierno se ha impulsado para tratar de frenar la influencia de los oligarcas.
Las acciones se dirigen a las corporaciones energéticas del este de Ucrania que se vendieron en 2012 y 2013 al multimillonario del acero y la energía Rinat Akhmetov y a un estrecho colaborador.
El fiscal general ha asegurado que las propiedades del Estado en Dniproenergo y Donbasenergo y uno de los principales distribuidores de energía en la región de Zakarpaty fueron vendidos por precios bajos en ofertas no competitivas donde solo participaron inversores favorecidos.
El movimiento en contra de oligarcas como Akhmetov y otros cercanos a Yanukovich parece formar parte de las medidas adoptadas por el Gobierno pro-occidental de Poroshenko para romper con el amiguismo del país y la influencia de los magnates y millonarios en la política.
“DES-OLIGARQUIZACIÓN” DE UCRANIA
Petro Poroshenko se encuentra bajo la presión de las instituciones financieras de Occidente y de los gobiernos aliados que contribuyen a ayudar económicamente a Ucrania para limpiar el país de corrupción. El presidente ha anunciado en una campaña que pretende cortar las alas a los oligarcas que pretenden influir en la política. “Los oligarcas quieren el caos, yo quiero la des-oligarquización de Ucrania”, ha sentenciado.
La industria del gas ha sido el principal campo de batalla para competir por los intereses oligarcas desde que Ucrania se independizó de la Unión Soviética en 1991. Los diputados del Parlamento han puesto ahora sus ojos sobre el magnate Dmytro Firtash, propietario del Grupo DF, que fue arrestado en Viena hace un año a petición del FBI pero que aún controla un imperio de gas.