El ojo que todo lo ve en las ciudades

Coquetas calles y plazas a la sombra de los árboles, rincones llenos de vida, mercados a rebosar de productos de la tierra, fuentes a cada paso y monumentos con historias dignas de conocer. Una ciudad se para, se disfruta y se contempla. La cuestión es que no siempre se puede pasear con tranquilidad, en muchas ocasiones las prisas sumergen a las personas en una espiral frenética. Una contrarreloj que cada segundo perdido hace bajar puestos en la clasificación de la vida.

La clave de la velocidad no está siempre en las piernas. Las zancadas son importantes pero también las nuevas tecnologías. Los tiempos han cambiado y una maratón diaria de trabajo, supermercado, recogida de niños del colegio, gimnasio y casa ha pasado a un segundo plano. Quemar zapatilla es una opción, sin embargo, existen muchas más. Lo mismo pasa cuando uno llega a una ciudad desconocida. La vorágine atrapa y el nuevo vecino se siente tan perdido e impotente que tira la toalla antes de embarcarse en la aventura.

Un grupo de investigadores de la Universidad Pontificia de Salamanca (Upsa) ha desarrollado Eye City, una aplicación para dispositivos móviles que marca el destino, y calcula automáticamente, utilizando datos del tráfico en tiempo real, las opciones de transporte disponibles en ese momento, recomendando las más rápidas. Además, muestra el coste de cada una de ellas y la cantidad de calorías que se consumen al realizar el trayecto, en el caso de que se opte por hacerlo caminando.

Dentro de la amplia variedad de alternativas que maneja la plataforma se encuentran desde rutas a pie o en bicicleta, hasta rutas en taxi o en autobús urbano. «Es un ojo que todo lo puede ver en Salamanca», apuntan sus creadores, Pablo Flores y Iago de Santiago. Y es que este sistema de momento lo han centrado en la ciudad del Tormes, no obstante, la idea se puede extrapolar a diferentes municipios.

Según afirman, es «un éxito seguro», ya que es la herramienta que cualquier persona necesitaría en su día a día cuando llega a una ciudad que no conoce. Es verdad que no son los únicos que tienen un sistema de estas características, sus competidores ofrecen servicios en Madrid y Barcelona. No obstante, están contentos por haberse convertido en los primeros en operar en Salamanca. «Era una lástima que una ciudad universitaria y con tanta vida no tuviese una aplicación de transporte que ayudase a la gente a moverse por aquí», subrayan.

El proyecto está basado en una tecnología orientada a objetos. Este aliado llamado Filemaker Pro Advanced se ha convertido en «la mejor fórmula» para las empresas que quieren incorporar agilidad en el desarrollo de sus trabajos. Integra estructura de datos, lógica empresarial y herramientas de creación de interfaz de usuario en un mismo paquete. Indican que se trata de una aplicación de desarrollo rápido que aporta la posibilidad de acelerar desarrollos y habilitar cambios inmediatos. «Ofrece un Entorno de Desarrollo Integrado y herramientas que permiten a los desarrolladores diseñar de forma visual formularios, menús, informes, tablas y más soluciones integrando técnicas de apuntar y clicar o arrastrar y soltar».

Utiliza una plataforma unificada para crear apps que funcionen a la perfección en dispositivos móviles, ordenadores y en la web, añaden Joaquín Moro y Manuel José Moro, tutores de esta iniciativa de la Upsa, antes de puntualizar que las actualizaciones en tiempo real posibilitan acceder a todos los usuarios a información más reciente al mismo tiempo. En este desarrollo «pionero» se ha integrado Distance Matrix API, un servicio web que proporciona distancia y tiempo de viaje para una matriz de orígenes y destinos según la ruta recomendada entre los puntos de inicio y final.

Eye City arrancó cuando un profesor informó a Pablo Flores y Iago de Santiago de que la universidad organizaba «un talent» y les explicó los requisitos para poder participar. «Al principio no teníamos muy claro lo que íbamos a hacer, pero unos días después tuvimos una idea. Los dos somos de fuera de Salamanca, y nos acordamos de que cuando llegamos en nuestro primer año no sabíamos movernos por la ciudad y por eso cogíamos muchos taxis, gastábamos mucho dinero... Nos dimos cuenta de que esto no sólo nos pasaba a nosotros, sino a todos los estudiantes de fuera, también a turistas e incluso a los salmantinos», recuerdan. Así que se pusieron manos a la obra y desarrollaron un producto que hiciera la vida más fácil a la sociedad. Estudiaron el mercado y al ver que no existía nada, crearon esta herramienta.

Señalan que las ventajas son muchas y variadas. La primera de todas es que, además de mostrar las rutas más cortas posibles entre la ubicación del usuario y su destino, ofrece la posibilidad de saber de antemano cuánto le va a costar el viaje según el tipo de transporte que elija. «Y todo utilizando información del tráfico en tiempo real», matizan. Está disponible para los sistemas operativos Android e iOS y podrían llegar a un acuerdo con empresas de taxis de la zona para brindar promociones especiales a las personas que se descarguen la app.

Sus planes inmediatos son acabar la carrera y más tarde no descartan seguir desarrollando nuevos productos porque participar en este programa les ha despertado el gusanillo de la imaginación. «Es probable que en el futuro intentemos volver a participar en algo parecido», pronostican Pablo Flores y Iago de Santiago. De momento formar parte del Club Universitario de Innovación de la Upsa les ha aportado el conocimiento de cómo funciona el sector de las aplicaciones móviles, desde la planificación de un proyecto hasta el desarrollo de la idea. De igual manera, los participantes se han dotado de conocimiento referente a estrategias empresariales para sacar adelante una iniciativa propia y presentarla en público. Esfuerzo y trabajo que con toda seguridad se podrá aplicar en el futuro.