BALONMANO / LIGA PLENITUDE ASOBAL
‘Pedrea’ para el Recoletas en Torrelavega
Merecido y valioso premio, empate (31-31), para el equipo de Pisonero en Torrelavega, donde pudo conseguir un premio mayor que dejó escapar en la última jugada del partido
Pablo Herrero vuela y arma el brazo antes de lanzar tras superar la defensa del BM Torrelavega.
El gozo en un pozo. Sensaciones encontradas. El Recoletas Atlético Valladolid puso punto y final a una gran primera vuelta para acabar octavo con 16 puntos, los mismos que séptimo (Nava) y sexto (Cuenca). Y lo hizo ‘robando’ un punto que bien pudieron ser dos al segundo clasificado, el poderoso Bathco Torrelavega, el único equipo que mantenía la estela del inaccesible FC Barcelona.
Un empate (30-30) de sabor agridulce, de ‘pedrea’ porque pudo ser premio gordo para un laborioso Recoletas que supo mantenerse en pie en todo momento pese a que su acaudalado rival (al menos a la hora de pagar nóminas) mandó siempre o casi siempre en el marcador con diferencias que alcanzaron los cuatro goles (20-16; minuto 37).
Álvaro Martínez vuela ante la defensa del Torrelavega en el pabellón Vicente Trueba.
Sin embargo la superioridad del Bathco Torrelavega, cimentada sobre todo en la aportación de su portería, con el ex gladiador azul convertido en autentico flotador de su equipo con hasta 16 paradas (35% de efectividad) no fue obstáculo alguno para el equipo de Pisonero, de nuevo liberado y sin presión, que supo aguantar y remar para meter en un lío al segundo clasificado. Y es que hasta por tres ocasiones cuando el partido parecía roto, en la primera mitad con los dos arreones del Torrelavega (6-3 y 9-6), y en la segunda con el definitivo que ponía la máxima del partido con un gol del primera línea Prokop, curiosamente el que se iba a convertir en salvador de su equipo en la jugada final, el Recoletas sacó la raza para agarrarse al partido.
Y lo hizo no precisamente en las mejores condiciones, desperdiciando dos de sus tres penaltis (por ninguno de su rival), echando de menos a su central Alejandro Pisonero, un filón en el juego entre líneas que necesitaba el equipo y... sin la aportación de la portería, con Juan Manuel Bar marcado por una de sus desconexiones (2 paradas de 10 lanzamientos) y con Gerard Forns, al rescate pero con poca efectividad (7 paradas de 30 lanzamientos) en su último servicio con la camiseta de los gladiadores azules.
El Recoletas no solo se enganchó al partido con su gran trabajo defensivo y confiado a la calidad de su lateral José de Toledo, posiblemente en unjo de sus mejores partidos con el Recoletas, autor de 8 dianas y asumiendo el liderazgo ofensivo, sino que de forma osada pujó por la victoria.
Lucha en la línea de seis metros entre el Recoletas y Torrelavega.
Porque a ocho minutos para el final enseñó sus garras colocándose por delante en el marcador (25-26)y pese a la calidad del rival y la presión del público cántabro, supo aguantar los contragoles del Torrelavega, para ponerse de nuevo delante en el electrónico del Vicente Trueba a tres minutos para el final (29-28). La injusta exclusión de Pablo Herrero no arrugó a los vallisoletanos que se encomendaron al fusil de De Toledo para ponerse tras tiempo muerto uno arriba (30-31) a 16 segundos para el final. El Recoletas podía cantar el ‘Gordo’ pero la pizarra de Torrelavega, en la jugada final llevó a la pedrea con un gol in extremis de Prokop que ponía el empate final (31-31).