BALONMANO | LIGA ASOBAL
El año de la ilusión para el Recoletas Atlético Valladolid
El presidente Mario Arranz confía en dar el salto de calidad en una temporada récord de abonados (casi 1.300) y con una plantilla llamada a lograr más que la salvación
Mario Arranz, presidente del Recoletas Atlético Valladolid. / J. M. LOSTAU
Mario Arranz no duda ni un segundo en elegir la palabra con la que define la temporada 23-24 para el Recoletas Atlético Valladolid: ‘ilusión’. El presidente de los gladiadores azules explica el porqué, casi en vísperas de visitar al BMHuesca.
«Son varias causas las que me llevan a calificar así este año deportivo. En primer lugar, estamos muy contentos con la respuesta social. Tenemos ya 1.290 abonados, batiendo el récord anterior, del último año, de 1.283. Y con los que se hagan el mismo día del primer partido en casa (domingo 17, contra Puerto Sagunto), porque seguro que algunos esperarán ese día para renovar, seguro que pasaremos la cifra de 1.300. Es una gran alegría porque el 95% de los abonados del año pasado renovó, y con el goteo final estoy seguro de que estaremos muy cerca del cien por cien».
Pero hay más causas por las que el presidente muestra su felicidad y esperanza. «Con todos los respetos a los que estaban el año pasado y no están, además de los cedidos, creo que esta temporada hemos dado un salto de calidad con la plantilla. Los jugadores que han llegado nos pueden aportar mucho para pensar en algo más que el la simple permanencia. El año anterior pasamos por problemas pero hicimos un gran final de Liga y nos alejamos de los puestos de descenso. Esta temporada nuestra aspiración debe ser dar un salto más y pensar en una permanencia más holgada, mirando hacia arriba. Nuestro objetivo es no pasar problemas y pienso que hay jugadores para lograrlo. Lo hemos demostrado durante la pretemporada, aunque los ensayos no marcan siempre el futuro. Los nuevos se tienen que acoplar del todo a un equipo como el de Pisonero, de un carácter muy marcado de juego rápido y mucho trabajo físico. En cuanto los recién llegados asimilen bien lo que quiere, creo que podemos ver buen juego acompañado de victorias. En los amistosos ante Kielce y Ademar ya se vieron cosas, aunque perdiésemos».
Mario Arranz hace alusión a dos piezas que pueden ser muy importantes para Pisonero . «Edu Calle es un jugador de la escuela del Barcelona y eso ya dice bastante. Es un soldado. Le dices que pase por una pared, y pasa. Tiene una predisposición tremenda y aunque viene sobre todo para la faceta defensiva, también puede aportar en ataque».
«Afonso Lima -agrega- es un jugador de nivel europeo que ya sabe lo que es jugar competición continental y nos tiene que impulsar en ese salto de calidad que queremos dar. Cuenta con una clase tremenda y apuesto a que puede ser una de las sorpresas de esta próxima Liga».
El presidente tampoco se olvida de dos jugadores lastrados el último año por las lesiones y que toman casi el carácter de fichajes. «Contaremos por fin en todo su potencial con D’Antino y Alejandro Pisonero, que serán muy importantes. Creo que hemos confeccionado una muy buena plantilla. Quizá tenga alguna carencia en la segunda línea, pero es subsanable con los jugadores que hay y con el filial, que ya está una categoría más cerca».
A Arranz también le ilusiona «el cambio de imagen del club y el hecho de que por fin tengamos una Liga Asobal profesional».