Potencia en la medular

El puzle de la salvación ya no tendrá más piezas. Desde la medianoche del 31 de enero (el mercado de invierno cerraba a las 23.59), los equipos del fútbol profesional han cerrado sus plantillas. Sólo podrán incorporarse algunos jugadores de los filiales y, lo que nadie quiere, un nuevo fichaje a causa de una lesión de larga duración.

¿Como se ha quedado el Real Valladolid? Los deseos de Sergio se han visto cumplidos. El míster quería reducir la plantilla y hay dos futbolistas menos, sin contar a El Hacen, que sólo jugó en Copa en Tenerife, apenas actuó en el filial y se ha ido al Lugo hasta junio. Además del mauritano, se han marchado a préstamo Anuar, Aguado y Luismi, y se han rescindido las cesiones de Lunin (Oviedo), Barba (Benevento) y De Frutos (Rayo).

El técnico también pidió un lateral izquierdo y ya está aquí. No sólo está, sino que juega desde su llegada y parece que lleva toda la vida en el equipo. Atiende al nombre de Raúl Carnero.

 A mayores ha llegado el fichaje más bizarro de toda la Primera: Ben Arfa. Sin equipo, con una calidad incuestionable y una personalidad difícil. El otro refuerzo de nivel internacional es Matheus Fernandes. En julio será del Barcelona aunque quien ahora lo cede es el Palmeiras. El citado Carnero y Caro completan la lista de refuerzos.

PORTERÍA. La marcha de Lunin y la llegada de Caro debilitan a priori una línea en la que se perpetúa como titular el eterno Masip. La falta de minutos del ucranio, que sólo jugó en Copa, le empujó a buscarse destino en el Oviedo, tras un nuevo préstamo del Real Madrid, algo molesto por la falta de minutos de sus cedidos. Caro vuelve tras hacerse con la portería de la Ponferradina, después de un comienzo en el banquillo. Ahora está lesionado y Samu, del filial, es el suplente.

DEFENSA. La línea más regular, segura y de mejor rendimiento del equipo apenas ha sufrido variaciones. Se ha ido Barba después de no convencer como lateral zurdo y a cambio ha llegado Carnero, aspirante a destronar al aún lesionado Nacho, gracias a su capacidad defensiva y aporte ofensivo. Es buen centrador.

En el otro ala se esperaban novedades, ya que hay tres jugadores, pero seguirán Moyano, Antoñito y Porro. Éste ha sido la gran decepción pero Sergio le quiere dar otra oportunidad. El internacional sub 21 puede ser una pieza importante para jugar en 5-3-2 pero debe defender mucho más.

La zona de centrales sufrió una baja durante la temporada... por cambio de ubicación. El descubrimiento de Joaquín como medio defensivo dejó a los intocables Olivas y Salisu con Javi Sánchez como repuesto. El cedido por el Real Madrid no quiso buscar otro destino pese a no jugar. En caso de urgencia o incluso si se cambia de formación a tres centrales para un partido o durante el mismo, Joaquín puede volver al eje de la zaga.

CENTRO DEL CAMPO. La enorme lista de seis mediocentros sufrió la baja de la mitad, con las salidas de Anuar, Aguado y Luismi. Siguen el citado Joaquín, Alcaraz, Míchel y San Emeterio, y son novedades el defensivo Matheus y el ofensivo Ben Arfa. Posiciones de inicio, pues el brasileño puede incorporarse al ataque, hasta el borde del área rival, y el francés ser engarce, mediapunta o segundo delantero. 

 Los extremos son los mismos, excepto el egresado De Frutos. La única novedad es que Toni ha arrebatado en el izquierdo a Waldo la presunta titularidad con la que comenzó la Liga. En el derecho, Hervías espera la oportunidad ante el incombustible Plano, aunque alguna vez éste se ha desplazado al otro flanco para dar entrada al riojano, que es de los cuatro quien cuenta con más desborde y mejor tiro en carrera (junto con Waldo) y a balón parado.

DELANTERA. Siguen los mismos: Ünal, Guardiola y Sandro. También en la punta ha cambiado la prelación. El fichaje estrella del verano es el suplente, el turco es ahora el gran referente y el balear su complemento en ataque.

Sergio no ha querido fichar otro atacante  por dos causas principales. La primera es que piensa que el problema con el gol no está causado por la inoperancia de los delanteros, sino porque no les llegan balones. De ahí el fichaje en la medular de dos jugadores de calidad y buenos pasadores, cada uno a su escala y en su zona del campo.

La segunda es la presencia de Miguel en el filial. El tudelano lleva catorce goles en Segunda B, su juego e implicación en el campo  han crecido exponencialmente y el club piensa en él como jugador de la primera plantilla en un futuro no muy lejano. 

Por eso Sergio y el director deportivo Gómez, antes de traer un jugador para minutos residuales, prefieren darle una oportunidad cuando sea necesario. Quien debe pensar sólo en el filial es Plaza.