Punto de oro

El Valladolid reaccionó en Mendizorroza tras un inicio de partido lamentable y se trae un punto muy valioso tras los goles de Joaquín y de Ünal, de penalti (2-2).

Un fallo garrafal de Yoel puso el partido cuesta arriba en el minuto 3. El portero se confió tras una cesión de Borja y su lanzamiento pegó en la pierna de Guidetti y acabó en el fondo de las mallas. No fue el único desliz de Yoel. En el minuto 24 se quedó estático bajo la línea de meta en un lanzamiento de falta a cargo de Jony y no pudo evitar el 2-0.

Fueron dos mazazos para un Valladolid que necesitaba la victoria tras los dos tropiezos consecutivos en Zorrilla ante Sevilla y Getafe. Sergio formó de inicio con un centro del campo inédito al alinear a Borja y a Joaquín. Míchel se quedó en el banquillo y Alcaraz y Anuar eran las bajas importantes, el primero por sanción y el segundo por lesión.

El Valladolid espabiló a medida que avanzaba el crono y se hizo dueño del centro del campo. Influyó en ello la entrada al campo de Míchel, que en el minuto 30 sustituyó a Borja, quien no pudo continuar debido a unas molestias. Míchel intervino mucho en el juego y le dio al Valladolid la profundidad que necesitaba. También hay que destacar la aportación de Waldo, que en el minuto 20 reemplazó al lesionado Keko.

El equipo blanquivioleta acortó distancias en el minuto 38 al cabecear Joaquín una falta lanzada por Óscar Plano. Era el premio a la reacción del Valladolid ante un Alavés conformista que se estaba dedicando a mantener la renta. Dos ocasiones de Guardiola poco antes del descanso pudieron servir para remontar pero sus remates fueron desviados por Maripán y Pacheco.

El Valladolid mandó en el segundo tiempo, buscó de forma insistente el gol del empate y lo consiguió al transformar Ünal un penalti a Guardiola.

Con este empate, el Valladolid sale de forma provisional de los puestos de descenso. Su clasificación al final de la jornada dependerá del resultado del Celta-Girona que se disputa el sábado