«Somos de sufrir»

Ha habido derrotas tras las que Herrera ha comparecido en la sala de prensa con menos rictus de dolor. La angustia tan propia de estas fechas tamizó el triunfo pucelano. «Da la sensación de que cualquier cosa que consigamos tendrá este nivel de sufrimiento. Hoy no tenía que haber sido así, pero tenemos un estado de nervios que no es normal. Está claro que no sabemos terminar los partidos. Somos de sufrir», confesó el míster, que continuó con la autocrítica.

«Sin balón íbamos a apretar donde no corresponde y con él hemos fallado gran cantidad de pases, sobre todo en la primera parte. Sólo lo puedo achacar a que tengo a la gente muy nerviosa. Durante la misma se han visto cosas esperpénticas, pases que no entiendes que falle ese jugador».

Entre lo valleinclanesco, destaca el gol del Córdoba. «Es otra situación ridícula que no tiene que pasar. Puedo asegurar que estas situaciones me están quitando algún año de vida. Se me hace difícil, entenderlas, pero sólo las puedo achacarlas a los nervios con los que salimos a nuestro campo. En casa somos un equipo con mucha ansiedad, quizá porque nos falta madurez».

El 4-1-4-1 fue juzgado con equidad pese a la victoria. «El equipo ha respondido a medias. No tiene la capacidad de robar balones. Las segundas jugadas [en defensa] son todas para el contrario. Con el balón antes éramos perfectos y ahora, un manojo de nervios».

Herrera explicó por qué contó con De Tomás. «Era un buen partido para él. Los centrales del Córdoba dejan recibir y podía hacer muchas cosas». También acabó muy contento con Mata y su gol. «Ya le felicité por su trabajo la semana pasada».

Y elevó un exhorto a la hinchada blanquivioleta. «Para los dos próximos partidos en casa pediría a nuestra afición que estuviera a muerte con nosotros, porque nos pueden dar todo esos dos partidos, si somos capaces de hacer algo la próxima semana».

LUIS CARRIÓN . El entrenador del Córdoba reconoció que su equipo «trató de pelear hasta el final». Aseguró que el 2-0 les hizo «mucho daño» porque «mató la reacción» que su escuadra encauzaba. Y admitió que la «falta de claridad al final» permitió que el Real Valladolid se llevase los tres puntos.

Suárez. Preocupa la pobre asistencia y habrá promoción en el sprint final

Los datos lo dicen todo. Ayer el estadio Zorrilla tuvo una de las entradas más pobres (6.690 espectadores) de lo que va de temporada. Cinco mil abonados se quedan en casa y este equipo cada vez engancha menos, justo cuando más lo necesita. Una preocupación que el presidente Carlos Suárez tiene muy presente y que va a intentar solucionar en las cinco jornadas caseras que quedan para terminar la Liga. «Hay que movilizar el tema porque nos vamos a jugar cosas muy importantes y siempre es mejor hacerlo con el respalda del público», comentó. Además espera que el equipo tenga «una buena racha» para que la gente «se enganche» y recordó que es mejor pitar «al final» porque durante el partido, «influye a los jugadores»

Incluso bromeó con la celebración del partido de la final de rugby el próximo 30 de abril, un día antes de jugar contra el Numancia. «Esperemos que se sume mucha gente y vengan también de la Santboiana». Respecto al juego, criticó el gol que llegó tras «un fallo grosero», que en esta ocasión «no nos ha costado un punto, pero en anteriores veces sí, y así es complicado luchar por lograr el objetivo». «Hay que mejorar el juego, porque la actitud es buena». J.I.F.