Valladolid rinde homenaje con un premio a Rubén Martín, trabajador de limpieza fallecido

Rubén Martín era operario del servicio de limpieza y perdió la vida en diciembre de 2022 mientras manipulaba una barredora. Tenía 46 años. Su nombre, desde entonces, permanece ligado al compromiso por un Valladolid más limpio. En su memoria, el Ayuntamiento ha creado un galardón que busca, por un lado, dignificar una labor esencial -la limpieza y recogida de residuos-, con frecuencia invisible pese a su importancia; y por otro, reconocer el ejemplo de quienes, con su esfuerzo diario, contribuyen a mejorar la ciudad.

 'Valladolid Ciudad Limpia - Rubén Martín Portero' -así se llama este reconocimiento- busca ensalzar la labor de dos tipos de protagonistas. En primer lugar, a los propios miembros del servicio municipal, cuyo trabajo diario, como lo define el decreto que lo impulsa, es "fundamental para garantizar tanto la salubridad, como la seguridad y el ornato de la ciudad". Pero la convocatoria no se cierra al servicio de Limpieza. Abre sus puertas a cualquier persona, organismo, asociación o entidad que, con sus acciones, haya contribuido de manera especial al cuidado de los espacios públicos.

La fecha límite para presentar las propuestas es el 30 de septiembre. La idea es que la sociedad vallisoletana se implique proponiendo candidatos que encarnen el espíritu cívico que esta distinción busca celebrar.

Este galardón va unido a una tragedia. El 30 de diciembre de 2022, Rubén Martín Portero, de 46 años, trabajaba en el Paseo de Juan Carlos I. Mientras intentaba reparar una máquina barredora, un fallo en el sistema hidráulico del vehículo provocó el accidente. Quedó atrapado y, pese a luchar por su vida durante nueve días en la UCI, las graves lesiones sufridas resultaron fatales. El decreto lo expresa con sobriedad: "Se considera adecuado homenajear a dicho trabajador asignando su nombre al premio".

Quienes reciban la distinción no obtendrán una prestación económica. Se trata de un premio honorífico, representado mediante una estatuilla con placa identificativa y un diploma acreditativo. Un gesto simbólico que busca poner el foco en el valor del ejemplo por encima de cualquier otra consideración.

Este galardón no es un gesto aislado hacia el operario fallecido en accidente laboral. Se suma a la placa que ya recuerda a Rubén en las instalaciones del servicio desde marzo de 2023 y al minuto de silencio que la ciudad le dedicó en la plaza Mayor poco después de su muerte.