La mitad de las mujeres asesinadas por violencia machista presentaron denuncia
El último informe recoge que entre 2016 y 2018 se produjeron ocho crímenes en Castilla y León / Burgos, Ávila, Salamanca, y León, fueron las provincias que registraron estos homicidios

-
Castilla y León registró entre 2016 y 2018 ocho feminicidios. En estos tres años, la mitad de las mujeres asesinadas habían presentado denuncia. Para el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), el silencio de la víctima es un factor de riesgo para la vida de las mujeres maltratadas. El porcentaje de delaciones por familiares de la víctima o terceros se encuentra entre el 5% y el 7%, por lo que resulta de enorme importancia concienciar a toda la sociedad de la necesidad de denunciar. Este trámite es el paso previo necesario para que las distintas administraciones puedan poner a funcionar los mecanismos establecidos para estos casos, bien con protección o bien con la investigación y condenada del responsable del maltrato.
En España, de las 46 de las 151 mujeres asesinadas entre 2016 a 2018 habían presentado una denuncia previa, lo que supone un 30,5% del total. Según expone el CGPJ, los estudios realizados durante años permiten afirmar que el 80% de las mujeres asesinadas no habían denunciado a su agresor.
Desde 2016 a 2018 los crímenes en Castilla y León se produjeron las provincias de Burgos, con tres asesinatos; Salamanca, con dos asesinatos y León, con dos asesinatos y Ávila, con un asesinato. Palencia, Segovia, Soria, Valladolid y Zamora no registraron ningún crimen en este lapso de tiempo.
El número de mujeres asesinadas por sus parejas o exparejas alcanzó las 25 en la Comunidad desde 2010 a 2018. El número de feminicidios llegó a los 506 en toda España en estos años, según el Observatorio contra la Violencia de Género.
El trienio de 2016 a 2018, según los datos de instrucción judicial, se situó en 151 las mujeres asesinadas a manos de sus parejas o exparejas. Esta cantidad se vio reducida el 11,2% frente al periodo de 2012 a 2015.
En los último tres años el promedio de mujeres asesinadas se sitúa en 50,3, reduciéndose en casi 10 crímenes respecto al promedio interanual, que es de 61,2.
La tasa de mujeres presuntamente asesinadas por sus parejas o exparejas en función de la población -medida por cada millón de mujeres mayores de 15 años- y Comunidad Autónoma, desvela que Baleares, con 4,82 crímenes; Canarias, con 4,31, y Navarra, con 3,67 crímenes, son las regiones con la mayor tasa de feminicidios entre 2016 y 2018. Castilla y León es octava con 2,43 crímenes por cada millón de mujeres. Por años del último trienio, la Comunidad fue segunda en el año 2016 -año que se produjeron seis crímenes con una tasa de 5,47 feminicidios y en 2018 undécima con una tasa de 1,82 feminicidios. En el año 2017 no se registró ningún asesinato machista en la región.
El perfil de la víctima que el CGPJ realiza, fruto del análisis y explotación estadística de todos los casos de violencia de género, muestra una diversidad que afecta todos los ámbitos y orígenes. Los rasgos encontrados sobre víctima y agresor, para establecer sus circunstancias socio-económicas, son una mera aproximación debido a que en muchos casos la información está incompleta. Los datos objetivos de los expedientes judiciales permiten trazar un cuadro exhaustivo de indicadores de edad, relación con el agresor o nacionalidad.
El perfil realizado muestra que las víctimas, entre 2016 y 2018, es de 43,5 años. La franja de 26 a 45 años concentra a las mujeres asesinadas por sus parejas o exparejas con 74 víctimas de las 151 que hubo. Además, el 64,9% de la víctimas mortales mantenía convivencia o vínculo afectivo con su agresor en lapso de tiempo. De ellas, el 45% mantenía vínculo matrimonial.
Respecto a la nacionalidad de las víctimas el 64,2% fueron españolas frente al 35,8%. El 48% de estas últimas procedían de países de la Unión Europea, el 42% de América Latina y el 9,3% de África.
Otro dato reseñable de la situación de las víctimas es que el 75% de ellas eran madres. Esta cifra pone de manifiesto que la maternidad es un factor de vulnerabilidad. 102 menores quedaron huérfanos por el asesinato de su madre en los años 2016 y 2018.
El perfil agresor ronda los 48 años y el 65,8% tiene nacionalidad española. La mayor parte de los asesinos se entregan a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, avisa a familiares o permanece en el lugar del suceso. Además, el 22,5% se suicida y el 13,2% tienen tentativa de quitarse la vida. El 0,7% de los agresores tratan de huir. En 2018 el 16% de los feminicidios acaban con el suicidio del agresor.
En cuanto a las circunstancias de los feminicidios, el domicilio es lugar donde más se registran los asesinatos, con el 81%, seguido del vehículo, con el 6%, y el lugar de trabajo, con el 2%.
Aunque la violencia machista se produce en todas las provincias y poblaciones de España, los datos indican que el 70% de los casos se producen en municipios de menos de 100.000 habitantes. Esto muestra que es el ámbito rural en el que las cifras muestran que las mujeres están más desprotegidas.