Abierto el Mercado Medieval de Ávila, que visitarán más de 40.000 personas

Entre 40.000 y 50.000 personas visitarán este fin de semana el Mercado Medieval de Ávila. Ésa es al menos la cifra que, teniendo el cuenta el número de visitantes de años anteriores, manejan desde el Ayuntamiento de Ávila para este evento, considerado la ‘gran fiesta’ de la capital abulense, que este año alcanza su vigésimo primera edición.

Además del Mercado Medieval, que cuenta con más de 300 puestos de las más diversas artesanías y que ocupa buena parte del centro histórico de la capital abulense, más de 200 actividades conforman el programa de las XXI Jornadas Medievales de Ávila que se inauguraron a mediodía de este viernes y que se prolongarán hasta el domingo por la noche. Se trata de un viaje en el tiempo que invita tanto a abulenses como a visitantes a echar la vista atrás y a remontarse a la Edad Media, la época en la que judíos, moros y cristianos convivían en esta ciudad en aparente armonía.

Un animado pasacalles, integrado por una bailarina, músicos, faunos y otros seres fantásticos, abrió la actividad de este Mercado Medieval que quedó inaugurado con el tradicional pregón, que este año contó con la participación del alcalde de Ávila, José Luis Rivas, quien animó a abulenses y visitantes a disfrutar de este evento. Tras él, y desde el Mercado Chico, tomaron la palabra unos divertidos bufones y lo hicieron también para pregonar estas fiestas de un modo muy divertido.

«Buenas gentes de este pueblo, vengan todos a la calle, ya que llegan los teatreros con afán de entusiasmarles, y no prestéis atención a su aspecto miserable». Así daba comienzo este divertido pregón con el que quedaba inaugurado «un gran mercado» que llenará de gente y de actividad las calles de Ávila durante tres días.

«Esperamos que venga mucha gente y disfruten de la ciudad», apuntaba el alcalde de Ávila tras quedar inauguradas las XXI Jornadas Medievales, asegurando además que «todo está planificado para que (su celebración) transcurra con absoluta normalidad». Quitaba importancia el regidor abulense al hecho de que esta edición no haya podido estrenar la declaración de Fiesta de Interés Turístico Regional, apuntando que «todo llegará y lo más importante es que hemos dado el pistoletazo de salida y que hay mucha gente y mucho ambiente».

Destacaba también Rivas al poco de abrir sus puertas el Mercado Medieval el «animado ambiente y la alegría en las calles». No en vano, lo cierto es que desde primera hora fue numerosa la presencia de visitantes, muchos de ellos ataviados al estilo medieval porque si por algo se caracteriza esta cita es por la importante participación de los abulenses que año tras año no dudan en vestirse de caballeros, damiselas, taberneros, clérigos o bufones para disfrutar de estos días en los que Ávila viaja al Medievo.

Así, nada más abrir sus puertas los puestos del mercado se llenaban de visitantes atraídos por la variada oferta de los mismos. Artesanías varias, elaboradas en materiales tan diversos como madera, cuero o plata, y tabernas y otras paradas para el descanso y el buen yantar dan vida a este Mercado Medieval que un año más, y durante tres días, traslada a abulenses y visitantes varios siglos atrás en el tiempo.